"Cuando intentas ser moderado la presunción de alevosía aflora rápidamente". Son palabras del exconseller de la Generalitat Santi Vila que ha ido a Catalunya Ràdio para hablar de su libro De héroes y Traidores y de su dimisión el 26 de octubre de 2017, el día antes de la proclamación de independencia.

Villa, que había sido conseller de Territori cuando Artur Mas era presidente, y conseller de Empresa y Cultura durante el mandato de Carles Puigdemont, explica porque aceptó ser conseller de un Govern independentista: "Todos asumimos consecuencias políticas y penales para el 1-O, pero a partir de aquella noche (la del referéndum) ya no hay consenso sobre cómo salir adelante". El exconseller se reafirma añadiendo que "durante la legislatura las cosas se hicieron bien" y que para sacar a Rajoy del inmovilismo "se tenía que jugar fuerte".

Santi Vila era uno de los encargados de hablar con el Estado una vez pasado el referéndum y en aquel momento estaba convencido de que "las negociaciones podían acabar bien" ya que "se habían intercambiado muchos mensajes con el Estado donde se decía que si había elecciones no habría 155". De la misma manera, el exconseller ha asegurado que si se hubieran convocado las elecciones el PSOE habría votado contra la aplicación del artículo 155 en el Senado.

De héroes y Traidores es un libro que expone que hay muchos independentistas "que piensan que nos pusimos unos plazos innecesarios" y que muchos pasos del procés "no se diseñaron ni plantificaron lo suficientemente bien". Sin embargo, el exconseller ha querido enviar un mensaje de tranquilidad apuntando que su libro no puede comprometer la situación de sus antiguos compañeros de Govern, actualmente en la prisión o en el exilio, ya que sus abogados lo han comprobado de forma exhaustiva.

"Junqueras, comprometido con evitar el colapso"

Santi Vila ha hablado de sus compañeros encarcelados y en el exilio, y ha empezado haciendo referencia al vicepresidente Oriol Junqueras, de quien ha dicho que "es una persona comprometida con evitar el colapso". El libro de Vila narra que él le pidió al líder de ERC que convenciera a Puigdeont para que convocara elecciones y que si ganaba Junqueras tendría el apoyo del PDeCAT (en aquellos momentos Puigdemont había dicho que no se presentaría a una reelección).

En todo momento, el exconseller se muestra convencido con las decisiones que tomó, es por eso que asegura dormir tranquilo aunque lo hace con pena; Vila explica que "duerme con pena" porque su carrera política "se ha acabado" y también por los presos políticos.

En la misma línea, Santi Vila ha anunciado que ya ha hecho una petición para poder visitar a los presos y de la misma manera ha explicado que "lo primero que haría si tuviera el pasaporte sería ir a ver a Puigdemont".

Finalmente, el exconseller matiza que la ley de transitoriedad (7 de septiembre de 2017) fue un error, "incluso desde el punto de vista técnico". Cuando menos, aquel día no dimitió "porque Puigdemont me pidió aguantar", concluye.