El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha rechazado nuevamente el referéndum que el presidente de la Generalitat Quim Torra le propondrá el próximo día 9 de julio en la reunión prevista en la Moncloa. Además, ha negado la existencia de "presos políticos" en España, desde Bruselas, en medio de la polémica con el embajador en los EE.UU., Pedro Morenés, suscitada por del encontronazo con Torra a raíz de ese término.

"Nosotros no utilizaremos el agravio territorial, ni la confrontación con el gobierno de Catalunya, pero es evidente también que este Gobierno va a ser claro con respecto al Estado social y democrático de derecho", ha afirmado Sánchez. Este ha insistido, como la vicepresidenta española, Carmen Calvo, había hecho por la mañana, que "España es una democracia homologable y presos políticos no hay".

Eso ocurre después de que no acabara bien la recepción oficial en Washington que la organización del Smithsonian Folklife Festival dio anoche en las delegaciones de Catalunya y Armenia. Los discursos de contenido enfrentado de Torra y el embajador español en los EE.UU., Pedro Morenés, y la tensión política vivida en el interior, acabó con la delegación catalana regañando al embajador y clamando por la libertad de los "presos políticos", y abandonando el acto en pleno, con Torra al frente.

En último lugar, el líder socialista y jefe del Gobierno ha insistido en que "siempre había sido muy claro" en cuanto al rechazo al referéndum y que su posición "no había cambiado" en este sentido. Por lo tanto, rechazaría la oferta de Torra de un referéndum legal.