Ni la Junta Electoral Central, ni el Tribunal Supremo ni la Mesa del Parlament alteran nada: habrá reunión entre los presidentes Pedro Sánchez y Quim Torra en Barcelona. Y ya hay fecha: el jueves 6 de febrero. Así lo ha anunciado este martes la portavoz del Gobierno María Jesús Montero después de la reunión del Consejo de Ministros. La fecha escogida, a pesar de ser una de las propuestas por la Generalitat, coincide con pleno del Parlament. La dirigente socialista ha defendido que el diálogo es "clave para resolver un conflicto que ya lleva demasiado tiempo enquistado" y ha dejado claro que Torra es el interlocutor. Después de esta reunión se habrá de constituir la mesa de negociación entre gobiernos, que ya va con retraso.
De esta manera, según ha informado La Moncloa, Pedro Sánchez empezará finalmente en Barcelona la ronda de encuentros con los presidentes autonómicos, aunque por protocolo habría ido primero el lehendakari Íñigo Urkullu. Después de acudir a Barcelona, según Montero, "seguirá por las restantes capitales de comunidades autónomas a lo largo de los próximos meses". Todavía no se sabe ni el lugar ni la hora de la reunión, ni si le acompañará algún ministro al encuentro.
La ministra portavoz también ha querido dejar cerrado el debate sobre la interlocución: "Hoy por hoy Torra es el president de la Generalitat". En este sentido, Montero ha insistido: "Es obvio que el presidente de la Generalitat es el president Torra y es la persona con quien se tiene que reunir el presidente español". Ha argumentado que "no hay ninguna resolución judicial ni norma que haya dicho lo contrario". Ha considerado que la Mesa del Parlament actuó de forma "adecuada" retirándole el escaño pero manteniéndole la condición de president. Preguntada sobre la "comodidad" de Sánchez con esta reunión, ha rebatido que la cuestión "no es la comodidad sino el sentido de la responsabilidad".
A pesar de los cantos de sirena de repetición electoral en Catalunya, y su posible afectación sobre el diálogo bilateral, el Gobierno dice que no trabaja con este escenario. "No entendemos que tenga que haber ningún tipo de afectación", ha respondido la dirigente socialista. Si bien ha admitido que "la política siempre es dinámica" y que tratarán de "encajar los acontecimientos". De momento, sin embargo, "seguimos con nuestra hoja de ruta". También ha instado el conjunto de partidos del Parlament a dialogar "desde una perspectiva amplia". En todo caso, desean que no afecte ni a los presupuestos del Estado ni a los de Catalunya.
Moncloa no interfiere en Catalunya
Desde La Moncloa reiteran que no "interferirán" ni darán su opinión sobre el escenario de un posible adelanto electoral en Catalunya. "Es al presidente de la Generalitat a quien corresponde la facultad de convocar elecciones", recuerdan fuentes del Gobierno. No obstante, subrayan que las posiciones de los partidos que sustentan el ejecutivo —PSOE y Podemos- en este caso son "claras". Tanto el PSC como los comunes se han posicionado favorablemente a la convocatoria en las urnas.
Rechazo a la vía unilateral
Después de la comparecencia de Oriol Junqueras ante la comisión del 155 en el Parlament, Montero ha reiterado su rechazo a la unilateralidad. "Ya sabemos cómo acaba una DUI, cómo acaba la celebración de un referéndum unilateral, cómo acaban las decisiones uniltaterales que se pudieran tomar por parte de la Generalitat", ha asegurado. Ha defendido que "necesitamos abrir una página diferente, de diálogo, después de demasiados años sin que se produjera".
¿Aragonès en el Consejo de Política Fiscal?
Con respecto al Consejo de Política Fiscal y Financiera, que reúne a la ministra de Hacienda con los consejeros del ramo, la portavoz del Gobierno ha adelantado que su previsión es reunirlo "durante las próximas semanas". También ha deseado que esta vez participe el vicepresidente y conseller de Economía, Pere Aragonès, que en las últimas ocasiones no ha asistido ha enviado a algún representante. "Ojalá el señor Aragonès acuda", ha asegurado. "Sería interesante que participara con absoluta normalidad como en otros momentos", ha defendido la ministra socialista.