El líder del PSC y jefe de la oposición al Parlament de Catalunya, Salvador Illa, ha reaccionado este martes delante de los micrófonos de la SER Catalunya a la propuesta del president de la Generalitat, Pere Aragonès, de llegar a "un gran acuerdo" para "volver a votar" la independencia. Illa ha admitido que no le gustó el discurso televisado que Aragonès pronunció este lunes por Sant Esteve, y ha exigido al jefe del Ejecutivo que sea honesto con Catalunya: "Él sabe perfectamente que todo eso no es el caso y que eso no pasará", ha reprochado, a la vez que le ha pedido que deje de "fijar horizontes imposibles" en el diálogo con el Estado que, asegura, no serán correspondidos. En cuanto a los presupuestos de la Generalitat, ha querido dejar claro que "no será un presupuesto de adhesión, como le gustaría a Aragonès, sino que será un presupuesto negociado", ha afirmado.

Illa pide a Aragonès que "toque de pies en el suelo"

En la entrevista en la radio mencionada, Salvador Illa ha respondido a los llamamientos a la "responsabilidad" que el presidente, Pere Aragonès, hizo en su discurso de cara a las cuentas del año que viene, y lo ha señalado directamente: "Desgraciadamente, el 1 de enero Catalunya no tendrá presupuesto, y el responsable es él", ha lanzado. "Él rompió un Govern [...] dijo que conmigo no [...] y ahora, deprisa y deprisa, estamos negociando", ha lamentado. Illa ha puesto el acento en el hecho de que las aspiraciones del Govern catalán y su actitud no concuerdan con su poder real: "Me resulta sorprendente las reticencias de ERC de aceptar las cosas como son", es decir, "el Govern más débil de la historia de Catalunya". Por eso, cree esencial que "ERC entienda la fuerza parlamentaria que tiene" y negocie las cuentas de 2023 "tocando de pies en el suelo", porque "un país ha de ser serio, tiene que tener valor para tomar decisiones" y huir de "la cultura permanente de la queja", ha reprochado.

¿El procés se ha acabado?

Preguntado sobre la salud del procés independentista después de semanas en las cuales políticos socialistas, incluido el presidente español, Pedro Sánchez, lo han dado por muerto, Illa ha matizado que si bien "el conflicto político" todavía está, hay tres elementos troncales que han cambiado o desaparecido y que vaticinan su fin. En primer lugar, la "unidad del independentismo", la cual no se ha sostenido y que se ha escenificado con la fractura del Govern de coalición. En segundo lugar, el líder de los socialistas catalanes ha celebrado el abandono de ERC de la vía unilateral, y que "se hayan comprometido a respetar el marco de convivencia" Constitucional. Por último, cree que el Govern de la Generalitat finalmente ha salido de la "confrontación permanente" con el Estado y ha quedado substituido por la mesa de diálogo, la cual, asegura, sigue siendo necesaria para "hablar" aunque un referéndum pactado "nunca pasará", ha opinado.