El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, ha instado al president, Carles Puigdemont, durante la reunión que han mantenidor en el palau de la Generalitat a que Catalunya “no se quede al margen del proceso de reformas del Estado”.

La consellera de Presidència, Neus Munté, se ha encargado de replicar públicamente a Rivera en la rueda de prensa posterior a la reunión recordando que "el catalanismo político lleva 30 años haciendo propuestas de reforma y cambio a nivel del Estado y ninguna de ellas ha sido tenida en cuenta ni escuchada".

El líder de Ciudadanos ha llegado a la plaça Sant Jaume esta mañana después de que por el despacho del president han pasado ya al secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, y el líder de Podemos, Pablo Iglesias, y cuando el Govern espera concretar la fecha del encuentro con el presidente en funciones, Mariano Rajoy.

Rivera ha emplazado a Puigdemont a participar en la negociación del nuevo sistema de financiación autonómica en el marco de la reforma de la LOFCA –que forma parte de los acuerdos entre PSOE y Ciutadans- y en el Consejo de Política Fiscal y Financiera, pero también en el proceso de reforma de la Constitución que clarifique competencias y la financiación y evite las conflictividades entre el Estado y las autonomías. “Esta reforma podría ser un lugar de encuentro”, ha remachado.

En esta línea, el político naranja ha admitido que hay aspectos en que hay coincidencias entre las dos partes, como por ejemplo, las inversiones en infraestructuras, con propuestas muy concretas como el corredor ferroviario mediterráneo.

De hecho, Rivera ha asegurado que está dispuesto a analizar los 23 puntos del documento que el expresident Artur Mas hizo llegar a Rajoy, en la última reunión que mantuvieron en la Moncloa en el verano del 2014.

Por el contrario, ha dejado claro que continúan las diferencias entre las dos partes –“discrepancia legítima”, ha calificado Rivera- respecto tanto el tema de la lengua como al procés independentista. “La vía de la independencia es una vía muerta, que sólo lleva a un callejón sin salida y a la confrontación”, ha advertido.

Sin tren en la vía

Por su lado, Puigdemont ha admitido que Catalunya participará en la negociación del nuevo sistema de financiación, pero no tendrá un papel protagonista. Por lo que respecta a la reforma de la Constitución, la consellera de la Presidencia, Neus Munté, ha dejado claro que “este tren todavía no está en la vía” y que, además, no afecta a los gobiernos sino a los partidos del Congreso.

Respecto a la disponibilidad de Rivera a recuperar el documento de 23 puntos que llevó Mas a la Moncloa, Munté ha dejado claro que “han quedado obsoletos por superación, por inacción del Gobierno central, que no ha cumplido ninguno.” No obstante, no ha dejado de provocar sorpresa en el ejecutivo catalán la disponibilidad de Rivera hacia estas propuestas después de les críticas que en su día les dedicó Ciudadanos cuando fueron planeadas por Mas.

Nuevo encuentro

Los dos políticos han acordado volver a encontrarse cuando se hayan desvanecido las dudas sobre el nuevo Gobierno español. Las dos partes han destacado el buen tono de la conversa. De hecho, Puigdemont y Rivera han compartido durante muchos años la presencia en el Parlament.

El encuentro ha empezado pasadas las once de la mañana. A diferencia del viernes pasado, cuando Puigdemont regaló a Pablo Iglesias un libro dedicado, hoy el invitado no ha sido recibido con un regalo.