"No entiendo porque Junts per Catalunya y Esquerra decidieron ir al pleno sabiendo que no tendrían apoyo". Esta es la pregunta que se hace el diputado cupaire Carles Riera en una entrevista en Catalunya Ràdio el día siguiente del debate fracasado para investir presidente a Jordi Turull. Según Riera convocar el pleno de investidura era como "pegarse un tiro en el pie" porque "se convocó de forma precipitada y sin la aprobación de la CUP".

El diputado ha vuelto a insistir en el discurso de mantener su abstención a cualquier candidato que se proponga "hasta que no haya un programa de acción de gobierno republicano". Riera expone que si se pone encima de la mesa un programa de su gusto "la CUP puede cambiar". Los de la CUP subrayan que para conseguir su apoyo tiene que haber una voluntad explícita de hacer República.

Carles Riera ha recordado que el candidato legítimo para su formación es el presidente Carles Puigdemont y ha reprochado a la Mesa del Parlament y al resto de partidos independentistas que en su momento no estuvieran dispuestos a "desobedecer y hacer valer los votos de Puigdemont y Comín", que actualmente son dos escaños perdidos porque no pueden ceder su voto.

En la misma línea, el dirigente cupaire ha pedido que "al lado del próximo candidato" haya un programa "que cumpla con la voluntad del referéndum del 1-O y de las elecciones del 21-D". Antes de despedirse, Riera ha puesto énfasis en "no retroceder y hacer República"; según él "es la mejor lucha anti-represiva".

Durante el discurso que Riera pronunció en el Parlamente este jueves en motivo del debate, mostró cierto apoyo a las palabras de Jordi Turull "si es desde una lógica anti-represiva", por su citación ante el Tribunal Supremo. Pero, como discurso de investidura, no gustó a la CUP, y así se lo hizo saber durante el debate de ayer. "Hoy era un discurso de investidura, y ha sido un discurso autonomista, con propuestas neoliberales", ha valorado. Y le lanzó: "No es el discurso de un candidato republicano, sino del PDeCAT".