Aunque la CUP firmó un acuerdo con Esquerra para permitir la investidura del president Pere Aragonès, no ha pasado una semana entera que esta formación política no haya avisado a los republicanos de las condiciones que les han puesto si quieren seguir en el Govern y cumplir la legislatura. Por una parte, las políticas sociales donde el plato más fuerte son los desahucios y el papel de los Mossos, de la otra, las relaciones con el Estado español para aspirar a la soberanía catalana.

Esta semana ha tocado hablar más de indultos y mesa de diálogo y por lo tanto nos quedamos en esta última cuestión. En una entrevista a Catalunya Ràdio, la diputada de la CUP Eulàlia Reguant recuerda: "Con los indultos y la mesa de diálogo, donde el Gobierno se niega a hablar de amnistía y autodeterminación, no se resuelve el conflicto". Y por eso exige que el Govern se niegue a resolver, de rebote, los intereses de Pedro Sánchez para seguir teniendo el apoyo en el Congreso de los Diputados: "Y si eso [los indultos] lo hacen para estabilizar su gobierno en el Estado, se equivocan. Esperamos que el resto de fuerzas independentistas también lo tengan claro".

La CUP ha reiterado que no confía en la mesa de diálogo aunque no se opondrá, pero sí en las derivadas que esta pueda comportar: "No se vale estabilizar un Gobierno que niega la mayor y por lo tanto niega que aquí se pueda exigir el derecho a la autodeterminación".

En este sentido, el presidente de Unidas-Podemos al Congreso, Jaume Asens, ya marcó ayer la línea que precisamente reprocha Reguant. "Lo que estamos esperando todos es que se sienten en una mesa a dialogar y renuncien a la vía unilateral, como mínimo de momento", declaró ayer Asens que, además, aseguró que este gesto ya lo están haciendo las fuerzas independentistas", lejos de la realidad que Reguant, 24 horas después, ha recalcado.

Por todo ello, la CUP avisa al president Aragonès: Si la tentación de Esquerra es pacificar estos dos años y esperarse a una confianza absurda del PSOE se equivocará y habrá un embate de la gente contra el Govern. Y aquí todo el mundo tendrá que asumir las consecuencias y las responsabilidades políticas de eso". A la vez, Reguant admite que si le dicen en el año 2015 que ciertos partidos tendrían presos políticos no se lo habría imaginado nunca.

También defiende que la CUP "nunca ha cambiado, es la de siempre", delante de aquellos más críticos con la formación responde: "Somos los que siempre hemos tenido claro que este país necesita autodeterminarse, que hace falta cambiar el modelo económico y transformar el fondo. Buscamos las mejores maneras para cada momento con el propósito de conseguir nuestros objetivos políticos".

Fotografía de portada: La diputada de la CUP, Eulàlia Reguant, en una sesión en el Parlament del pasado mes de abril