Los diputados de Junts pel Sí Jordi Turull y Roger Torrent y la diputada de la CUP Anna Gabriel serán los miembros de la ponencia conjunta que se encargará de tramitar la reforma del reglamento. La propuesta, a instancias de Junts pel Sí, quiere incorporar la posibilidad de aprobar las proposiciones de ley a partir de un sistema de lectura única a petición de un solo grupo, lo que permitiría agilizar la aprobación de las leyes de desconexión.

Ciudadanos, PSC, Catalunya Sí que es Pot y PP han confirmado en la Comisión del Reglamento que no participarán en la ponencia conjunta. Consideran que hay otros mecanismos para reformar el reglamento, como una proposición de ley a instancias de todos los grupos y que, en cualquier caso, la reforma del reglamento es un trámite muy importante que necesita del consenso de todas las formaciones políticas.

En este sentido, el diputado del PSC David Pérez, ha puesto de manifiesto que "hay cuatro grupos que consideran que no es necesario reformar el reglamento" y el portavoz de Catalunya Sí que es Pot, Joan Coscubiela, ha pedido "de manera humilde" que Junts pel Sí "se repiense la configuración de una ponencia conjunta" para reformar el reglamento, aún más, teniendo en cuenta que hay otras vías para llevarlo a cabo.

El presidente de Junts pel Sí en el Parlament, Jordi Turull, ha reiterado la voluntad de su grupo de ser "consecuentes con los compromisos con los ciudadanos" y ha acusado en los grupos que se ausentarán de la ponencia de "dejadez de sus funciones". Por eso, el diputado se ha preguntado si el reglamento contempla algún mecanismo a fin de que se incorporen los diputados ya que, según considera, "tienen la obligación de hacerlo".

José María Espejo, diputado de Ciutadans, ha tildado de "escándalo" que Junts pel Sí pida que se impongan "sanciones para aquellos que no quieren participar de su iniciativa". En este mismo sentido se ha pronunciado el diputado del PP, Santiago Rodríguez, que ha asegurado que el hecho de participar en una ponencia conjunta es un derecho, y no un deber, de los diputados y ha avanzado que su grupo parlamentarios estudiará pedir "amparo para que se respeten los derechos de nuestros diputados".

La diputada de la CUP Mireia Boya ha sido la encargada de cerrar el debate y ha pedido a los "grandes defensores de los derechos" que defiendan también otros derechos, como una vida digna o el derecho a vivienda, que "se les pasan por donde se les pasan". Boya ha asegurado que harán suyas algunas de las reivindicaciones de la legislatura y demandas de los grupos sociales a la hora de proponer algunas reformas al reglamento

La última al intervenir ha sido la presidenta de la Comisión y también presidenta del Parlament, Carme Forcadell, que ha lamentado las acusaciones de algunos grupos sobre las decisiones de la Mesa y ha asegurado, en tono serio: "No permitiré que se cuestione la función de la Mesa ya que la ponencia se está constituyendo de acuerdo con el reglamento".

Reacción de los grupos

Después de la comisión, los portavoces de los grupos parlamentarios han comparecido en el Parlment para valorar la actualidad parlamentaria.

Los portavoces de los grupos de Ciudadanos, PSC y PP han coincidido en lamentar la "amenaza" del presidente de Junts pel Sí en el Parlament, Jordi Turull, que ha planteado que la Mesa sancione a los diputados de los grupos que no asistan a la ponencia conjunta.

El portavoz del principal partido de la oposición, Carlos Carrizosa, ha tachado de "chapuza" la propuesta de Junts pel Sí de que los grupos sean sancionados por el Parlament y ha considerado que el partido del Govern y la CUP quieren "silenciar los debates de la oposición ".

La portavoz del PSC, Eva Granados, ha asegurado que cualquier iniciativa parlamentaria "está intoxicada por el proceso" y Joan Coscubiela, portavoz de Cataluña Si Que es Pot, ha reiterado la importancia del reglamento, ya que son las "reglas del juego" y que, por este motivo hay un acuerdo para reformarlo. Sobre su ausencia en la ponencia, Coscubiela ha asegurado que la reforma del reglamento que propone Junts pel Sí "devalúa la calidad del debate".

El portavoz popular, Alejandro Fernández, también ha lamentado que las instituciones estén "al servicio de un solo partido" y ha repetido que la ponencia conjunta "vulnera los derechos de los diputados".