Anna Simó, Lluís Guinó, Lluís Corominas y Joan Josep Nuet han entrado y salido del Tribunal Supremo en menos de una hora. Ramona Barrufet no ha venido. Declarará desde Barcelona por videoconferencia el 21 de mayo des de los juzgados de Lleida. Ha alegado motivos de salud.

Hoy han conocido de voz del juez su procesamiento por desobediencia. Hace tres semanas lo hicieron los presos políticos que aprovecharon la comparecencia para dar un mensaje político al juez y a la sociedad catalana. Hoy las comparecencias de los exmiembros de la Mesa no han tenido nada que ver. Han respondido a sus abogados pero han tenido un perfil bajo. Sin mensajes grandilocuentes.

De hecho, Lluís Maria Corominas ha entrado en la sala de vistas a las 10.15 h y a las 10.24 h ya estaba fuera del edificio del Tribunal Supremo. Lluís Guinó no ha estado ni cinco minutos dentro de la sala. Igual que Anna Simó con no ha estado más de 2 minutos. Los tres han negado los hechos que se les imputan y han apelado a la inviolabilidad parlamentaria.

"Hemos reiterado nuestra declaración de noviembre. Hemos explicado que la Mesa del Parlamento ejecutaba trámites parlamentarios y que les protegía la inviolabilidad parlamentaria", ha explicado Lluís Guinó cuándo salía del Tribunal Supremo.

Corominas se ha marchado antes. Hoy tiene previsto visitar a los presos que hay en Estremera y en Alcalá Meco.

Sólo Joan Josep Nuet ha expuesto al juez que ante conflictos políticos hacen falta soluciones políticas. El diputado de En Comú Podem, que ha llegado acompañado por Xavier Domènech, ha esbozado antes de entrar lo que dirá al juez.

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Durante tres cuartos de hora Joan Josep Nuet ha respondido las preguntas de la Fiscalía, la abogacía del estado, el juez y su abogado. Y ha obviado VOX, la acusación popular.

"He puesto en valor el mecanismo parlamentario. Creo que este caso y la querella sufre de una falta de conocimiento de los mecanismos parlamentarios que se basan al debatir ideas políticas y cuando se convierten en leyes o resoluciones, pueden ser suspendidas por el Tribunal Constitucional", ha explicado Nuet en la salida. "En este caso se ha modificado la tradición parlamentaría de los últimos 40 años que es que el tribunal suspendía al final del tramite parlamentario. Se ha introducido el debate previo y la constitucionalidad previa, y evidentemente los miembros de la mesa de un parlamento no sueño expertos constitucionalistas y por lo tanto pueden presentar dudas y facilitar trámites que después sueño suspendidos", ha insistido.