El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha recibido un golpe por parte de un chico de 17 años cuando hacía un paseo por el centro de Pontevedra, su ciudad. El agresor se le ha acercado para pedirle una foto. En este momento le ha dado un golpe y le ha tirado las gafas, que se han roto. Los equipos de seguridad han actuado a continuación y han detenido al agresor.

La agresión se ha producido hacia las 17.50, al lado de la iglesia de la Peregrina, según el equipo de campaña del PP. La ministra de Fomento, Ana Pastor, que ha presenciado los hechos, ha intentado quitar hierro al incidente y ha invitado a la comitiva a seguir con el paseo, que Rajoy ha acabado sin las gafas.

Las mismas fuentes han precisado que el dispositivo de seguridad del presidente ha respondido inmediatamente y ha conseguido reducir al agresor que, sin embargo, también ha golpeado a uno de los agentes del equipo de protección antes de ser esposado.

El agresor ha sido identificado como Andrés de V., quien al ser detenido por la policía ha exclamado: “Estoy muy contento de haberlo hecho”, según fuentes policiales. El líder del PP, Mariano Rajoy, ha sido despedido con aplausos y con gritos de "presidente" a la conclusión del recorrido.

Algunos representantes políticos ya se han manifestado condenando la agresión. “La violencia nunca está justificada, mi rechazo absoluto”, ha dicho Pedro Sánchez. Francesc Homs ha lamentado los incidentes desde su Twitter: “Es desde el respeto que se pueden defender todas las ideas, como hacemos en Catalunya”.

El agresor

El chico no tiene antecedentes penales, según fuentes policiales. Pertenece a Mocidade Granate, un grupo de jóvenes seguidores del Pontevedra, "no excesivamente violento". En su página de Facebook, se presenta con una bandera republicana. Se enfrenta a un delito de "atentado" a un presidente del Gobierno, por el que podrían caerle hasta seis años de prisión. Sin embargo, al ser menor de edad esta pena podría ser rebajada.