El president de la Generalitat, Quim Torra, ha revelado esta noche en una entrevista a TV3 que ya se ha intercambiado mensajes con el presidente español, Pedro Sánchez, y que han acordado verse "lo más pronto posible".

"Necesito saber a qué presidente Sánchez me encontraré, el que votó el 155 o el que en su discurso en el debate de investidura abría algunas puertas," ha explicado Torra que ha insistido en reclamar "cuál es el proyecto de Pedro Sánchez para Catalunya".

Asimismo, ha adelantado que a partir de la próxima semana pondrá en marcha las reuniones con todos los grupos parlamentarios, empezando por la líder de la oposición, Inés Arrimadas.

La de esta noche ha sido la primera entrevista de la jefe del ejecutivo en la televisión pública catalana. Se ha hecho en una hora de máxima audiencia desde el saló Torres Garcia del palau de la Generalitat.

De la restitución a la Constitución

A lo largo de la entrevista el president ha insistido en la voluntad de restituir el Govern que fue fulminado por el 155 y completar el recorrido hasta una Constitución catalana. "Ahora es el momento de la restitución. De la restitución a la Constitución de la República catalana, es nuestro proyecto esta legislatura", ha sintetizado.

De aquí, según este recorrido, la necesidad de comenzar por recuperar el gobierno autonómico para poder revertir todo aquello que tumbó la aplicación del artículo 155 de la Constitución.

Querellas

A preguntas del director de la cadena, Vicent Sànchis, Torra ha insistido en replicar a los ataques de que ha sido objeto a raíz de sus artículos y tuits y ha mostrado la irritación ante las acusaciones de fascista y supremacista que se le han lanzado desde diferentes ámbitos políticos estatales.

Ha recordado que ya ha anunciado una querella contra el socialista Alfonso Guerra, y que hará lo mismo con todos aquellos que insistan en estas acusaciones. "Estoy harto de estos insultos. Para un catalán demócrata el peor insulto que se le puede hacer es nazi".

Al ser interrogado sobre las diferencias entre el PDeCAT y ERC que se hicieron evidentes con el anterior Govern, el president ha asegurado que todos los miembros de su gabinete tienen los mismos objetivos y son conscientes de que viven un momento excepcional. "No permitiré que en este gobierno pueda haber otros temas que nos distraigan de nuestros objetivos", ha asegurado.

El president ha pronosticado que todos los procedimientos abiertos con los políticos que están en el exilio se ganarán -"donde hay justicia ganaremos", ha asegurado- y eso influirá en el proceso en España. De hecho, ha advertido que "Con el PSOE eso se puede acabar, estas persecuciones se pueden acabar".

Ha alertado que no se puede pasar por alto la excepcionalidad que vive Catalunya y así se tiene que mantener presente en todo momento. También con la presencia del lazo en la fachada del palau de la Generalitat o en los escaños del Parlament, a pesar de la tensión que esto provocó la semana pasada en el hemiciclo. "Libertad de expresión y respeto. Si retrocedemos en eso, retrocedemos muchos años", ha advertido.

El jefe del ejecutivo catalán prevé que el Consejo de la República se podrá poner al marcharse una vez el presidente Carles Puigdemont pueda vuelve en Waterloo, cuando|cuándo se podrá reconocer la legitimidad del Consejo de la República y la Asamblea de Representantes.