Unas decenas de personas han quemado imágenes del Rey y de la Constitución en la manifestación de la izquierda independentista y anticapitalista. La concentración, con la CUP al frente, se ha organizado bajo el lema "Desobediència" y ha concentrado a unos miles de personas. Cinco mil, según los organizadores, 2.300, según la Guàrdia Urbana.

 

CUP, Arran, Endavant, el Sindicat d'Estudiants dels Països Catalans, Candidatura Obrera Sindical y Alerta Solidària, convocaban la manifestación, que ha empezado en la plaça Urquinaona de Barcelona y ha hecho un recorrido hasta acabar en el Born.

Al finalizar, se han encendido antorchas entre el público que han servido para que unas decenas de manifestantes quemaran unos folletos, repartidos previamente, donde aparecía en un lado la imagen del Rey, y en la otra, la primera página de la Constitución.

Esta acción ha sido una novedad en esta cita anual del Onze de Setembre dado que habitualmente, eran unos encapuchados los que se encargaban de quemar la imagen del monarca y la bandera española, y esta vez se ha pasado este gesto a los manifestantes.