El president de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha augurado que Europa tendrá que acabar interviniendo en el conflicto entre Catalunya y España. "Habrá un momento que la UE tendrá que dejar de mirar hacia otro lado", ha opinado en una entrevista con ACN. Puigdemont ha hecho este pronóstico al preguntarle por el escrito del TC que suspendió las conclusiones de la comisión de estudio sobre el Procés Constituent y las posibles consecuencias que eso puede tener para la presidenta del Parlament. Al día siguiente que Mariano Rajoy perdiera por segunda vez la votación para ser investido presidente español, Puigdemont ha ironizado con el bloqueo de la política del Estado: "Si no se espabilan, nosotros acabaremos el trabajo y en Madrid continuarán con un gobierno en funciones".

La semana que la mesa del Parlament ha presentado al TC sus alegaciones, Puigdemont ha considerado que sería una "barbaridad" que la justicia acabara inhabilitando a Carme Forcadell o que, en cualquier caso, se abriera la vía penal contra ella, tal y como pide la Fiscalía del Estado. Ahora bien, ha reconocido que "son capaces de hacer cualquier locura", porque la política española "ha perdido el juicio" en todo lo que hace referencia a la cuestión catalana. "Faltos de juicio pueden hacer cualquier cosa. Espero que no lo hagan, porque estamos hablando de una cuestión política que se tiene que resolver políticamente, y sólo políticamente tendrá solución, de cualquier otra forma, no", ha añadido.

Puigdemont ha avisado al Estado de que llegar a este extremo sería un "error colosal", pero además tampoco sería una "buena carta de presentación al mundo". De hecho, ha pronosticado que la UE acabará interviniendo en algún momento para hacer de mediador en el conflicto entre Catalunya y España. "Habrá un momento, que seguramente no es ahora, en que la UE tendrá que dejar de mirar hacia otro lado y reconocer que hay un problema político que requerirá en un momento determinado que tome decisiones" ha augurado.

El presidente ha encontrado "comprensible" que Bruselas hoy por hoy se inhiba, "porque no quiere conflictos entre Estados". Ha remarcado que hasta ahora se ha limitado a decir que era un "asunto interno", que no tiene posición oficial porque nadie le ha pedido que lo exprese, pero ha insistido en que "habrá un momento que eso pasará, y en aquel momento la UE no se podrá inhibir".

Defender la soberanía catalana en el TC

Con respecto a la presentación de alegaciones al TC por parte de la mesa, y que han sido criticadas por la CUP, Puigdemont ha negado que se esté incumpliendo la resolución del 9-N, como asegura el miembro del secretariado nacional cupaire Xevi Generó. En su opinión, lo que se está haciendo es precisamente "defender la soberanía catalana", y hay que hacerlo "ante los tribunales que sean", porque si algún día se pretende llegar a la justicia internacional, primero habrá que haber cumplido todos los trámites previos. "Y si esta defensa pasara por tener que presentar un recurso a un tribunal tercero, también lo haríamos. No nos tenemos que dejar encoger o acomplejar por estas cosas", ha insistido.

Igualmente, ha indicado que lo mismo harán con los recursos económicos que le corresponden a Catalunya, y que el Govern "no dejará de reivindicar hasta el último céntimo" aunque estén en manos "de una administración contra la que se está combatiendo". "Quien se piense que renunciaré a la defensa de los intereses nacionales de Catalunya en el mundo va muy equivocado", ha insistido.

El bloqueo en España

Después de que Mariano Rajoy haya fracasado en el debate de investidura, Puigdemont ha recordado que desde que él es president de la Generalitat siempre ha tenido que relacionarse con un gobierno en funciones en Madrid. "Si no se espabilan, nosotros acabaremos el trabajo y allí continuarán con un gobierno en funciones", ha ironizado.

Para superar el bloqueo de la política española, el president ha constatado que la única salida es tener el "coraje político y el compromiso" de resolver el problema de Catalunya, y eso pasa por permitir que los catalanes decidan su futuro. "Si España queda bloqueada es porque ha decidido quedar bloqueada, no porque Catalunya no haya querido hacer su contribución. Lo que no puede pretender el sistema político español es una declaración unilateral de investidura", ha opinado el president, que ha recordado a los grandes partidos españoles que las investiduras son "actos políticos democráticos que se tienen que ganar y se tienen que trabajar".

Después de que las formaciones catalanas en el Congreso hayan instado al PSOE a configurar una alternativa a Rajoy que pase por la celebración de un referéndum, Puigdemont ha reconocido que a pesar de ser escéptico, hay que mantener la esperanza. Ha argumentado que no hace falta que los socialistas compartan la idea de la independencia, sólo reconocer que el pueblo catalán "se ha ganado históricamente y también recientemente el derecho a decidir su futuro". Y reconocer eso, ha reiterado, "es lo que le falta a la política española para salir de su bloqueo".

De hecho, ha recordado que 36 de los 47 diputados catalanes han impedido la investidura de Rajoy, y si no hubiera participado ningún parlamentario de Catalunya, el popular hubiera salido escogido por mayoría absoluta.

Puigdemont ha augurado que si Sánchez no da el paso, habrá unas terceras elecciones en España, porque ve "difícil" que el PSOE "pueda desdecirse de todo lo que está diciendo" y favorezca la investidura de Rajoy.

En todo caso, ha indicado que Catalunya "se emancipó políticamente" el pasado 27-S, y que lo que pase en el marco de la política española "no altera la agenda ni las convicciones". "Si hay un gobierno del PP u otros comicios, nosotros tenemos que hacer la nuestra", ha dicho. Ahora bien, si hubiera una propuesta de referéndum, ha señalado que entonces sería necesario sentarse y negociar, y que se tendrían que "modular" las previsiones.