La existencia de presos políticos en Europa, desde los independentistas catalanes hasta Julian Assange, ha sido denunciada una vez más por el president Carles Puigdemont esta tarde ante el pleno del Parlamento Europeo.

Ante la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, en el marco del debate sobre las conclusiones de la reunión extraordinaria del Consejo de Europa del 32 de abril, Puigdemont ha advertido que la UE se está arriesgando a "dejar de ser un proyecto útil para los ciudadanos si no es capaz de ofrecer soluciones", que no sólo económicas sino también sociales.

 

Ha explicado que cuando la economía se debilita se movilizan recursos y se ha preguntado quién paga la factura cuándo los derechos humanos se ven debilitados.

Puigdemont ha alertado de que los derechos humanos están en peligro en Europa a raíz de la existencia de presos políticos, ha recordado que hoy mismo Amnistía Internacional ha reclamado una vez más la libertad de Jordi Sánchez y Jordi Cuixart, y ha interrogado: "¿La UE tiene un plan para salvar la democracia cuando ha sido dañada de esta manera?".

La intervención ha levantado aplausos entre algunos de los eurodiputados que seguían el pleno, con distancia de seguridad y muchos de ellos con mascarilla y guantes.