Un Govern abierto al diálogo más allá de los acuerdos de gobernabilidad con la CUP y que actuará “con garantías, sin pasos en falso y sin improvisaciones”. Estos han sido los rasgos que ha destacado el president Carles Puigdemont a la hora de presentar su nuevo Govern ante el hemiciclo del Parlament.

En primera fila, siguen la comparecencia por primera vez todo el nuevo Ejecutivo catalán. El president ha reiterado el compromiso con la hoja de ruta que ha llevado Junts pel Sí al Palau de la Generalitat, “la planificación, diseño y ejecución de todos los trabajo que nos han situado a las puertas de un nuevo Estado que queremos independiente en forma de república”.

Puigdemont ha cortado de raíz el debate sobre la duración de la legislatura, recordando que el compromiso es para 18 meses y ha garantizado que los consellers se dedicarán a la defensa de sus competencias para dar máxima respuesta a la crisis. “Aprovecharemos hasta la última coma, y el último punto de todas las competencias que tenemos todavía”, ha señalado.

Talante de diálogo

Antes de desplegar la explicación sobre la estructura del nuevo Govern, el president ha garantizado que presidirá su gestión “un talante de diálogo permanente con todos los grupos parlamentarios sin excepción”, más allá del acuerdo de estabilidad que JxSí ha cerrado con la CUP. “En ningún caso nos conformamos en tantos acuerdos como sea posible con los grupos de la Cámara”, ha asegurado.

Puigdemont, que ha pedido a sus consellers que comparezcan en el Parlament para exponer los ejes de los respectivos departamentos, ha insistido en señalar la nueva ley electoral como una de las prioridades del nuevo Govern, así como una ley del cambio climático o impulsar las infraestructuras de cercanías.

(Foto: Sergi Alcàzar)