El presidente Carles Puigdemont se ha enfrentado contra las declaraciones de la patronal Foment del Treball, que ha pedido "responsabilidad" en la respuesta a la inminente sentencia del juicio del 1-O para "no afectar a la economía". En el comunicado, la patronal de Josep Sánchez Llibre ha esquivado cualquier auxilio a los presos políticos, manifestando "el respeto más absoluto a las decisiones de la Justicia y a la pluralidad política como corresponde al estado de derecho y democrático en el cual convivimos".

A través de un tuit, Puigdemont ha culpado a la patronal de ser "cómplice" en las acciones del Gobierno para promover la "fuga de sedes" de Catalunya después del 1 de octubre del 2017. ¿"De qué responsabilidad hablan"?, escribe Puigdemont. ¿"De la de los que llamaban y amenazaban a las empresas catalanas para que cambiaran la sede social"?