El presidente Carles Puigdemont ha asegurado esta noche en una entrevista con Jordi Évole para el programa Salvados, que el referéndum del 1 de Octubre se celebrará, porque están los elementos "necesarios" para sacarlo adelante, y que el resultado se aplicará. Puigdemont ha insistido que si el 'sí' gana, se proclamará la independencia de Catalunya en los días previstos en la ley del referéndum, y que la intervención de las finanzas catalanas no lo podrá impedir. "Lo que dice esta intervención es que no se puede continuar como autonomía", ha añadido.

El presidente ha dejado claro que sólo consideraría inválido el referéndum si tuviera una participación bajísima, que ha cifrado en un 15%, pero ha precisado que no habrá ningún mínimo concreto de participación "tal como dice también la legislación española". "Los usos y costumbres en todo el mundo, excepto que se acuerde lo contrario como sucedió en Montenegro, es que no hay mínimos de participación", ha añadido.

Évole ha preguntado que pasaría si el gobierno español impidiera físicamente el referéndum, y Puigdemont ha afirmado que no contemplaba esta posibilidad. No obstante, ha soltado que si el Estado actuara así con fuerza convocaría el Gobierno y escucharía el Parlament "para ver qué hacemos". "No está sobre la mesa ahora hacer una Declaración Unilateral de Independencia (DUI), pero seguramente entonces alguien lo propondría, si el referéndum no se puede hacer", ha reconocido. El presidente, sin embargo, ha remarcado que lo que tiene sobre la mesa es el referéndum, y que lo ve totalmente posible.

Con respecto a los registros y detenciones que la Guardia Civil ha protagonizado esta semana, los ha descrito como "vergonzosos", porque aunque admite que el Estado puede intervenir la autonomía, nunca se habría imaginado que lo haría fuera de la ley, "cómo realmente está haciendo". El presidente ha expuesto que si a pesar de las amenazas la gente todavía sigue teniendo ganas de votar, ya hemos ganado, ya que considera que retirarse o rendirse sería "acabar muy mal".

Por otra parte, ha querido dejar muy claro que su gobierno no desobedece ya que lo que hace es obedecer la ley catalana; "los principios del derecho internacional". Además, ha lanzado un mensaje de tranquilidad indicando que el día 1 de octubre, cuando haya millones de personas votando, la policía no retirará urnas.

Otro tema que se ha comentado ha sido la multa que tuvo que pagar el expresidente Artur Mas por la orgaqnització del 9-N, la cual Puigdemont ha dicho que ha ayudado a pagar, que él y unos cuantos cargos públicos hicieron una derrama para poder ayudar. Finalmente, se ha mostrado escéptico con una moción de censura al presidente español, "Para hacer qué", ha dicho Puigdemont. La entrevista, que ha durado una hora, ha acabado con la pregunta de si teme ir a la prisión, el presidente de la Generalitat ha esta contundente: "No me gustaría que me detuvieran, pero si tiene que pasar haremos frente a cualquier situación".