El president en el exilio, Carles Puigdemont, ha desmontado la hipocresía política que hay con el vídeo en el que aparecen unos individuos disparando contra miembros del Gobierno, que ha provocado un gran escándalo en España cuando unas imágenes similares donde simulaban un fusilamiento del mandatario catalán en un pueblo de Sevilla fueron en su día menospreciadas. Puigdemont ha pedido no utilizar una doble vara de medir.

"Es una vergüenza y una acción repulsiva. La misma repulsión que tendrían que provocar cuando lo hacen contra independentistas", ha indicado.

"Estos del vídeo se saben impunes porque cuando policías y guardias civiles gritaban llenos de odio y rabia "¡a por ellos!" no les pasó nada. Ni les pasará nada", ha añadido.

Las fuerzas de seguridad españolas investigan un vídeo difundido en las redes sociales donde se ven prácticas de tiro contra fotografías del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, el vicepresidente segundo, Pablo Iglesias, y los ministros Irene Montero y Fernando Grande-Marlaska, así como el dirigente de Podemos Pablo Echenique. El vídeo ha sido colgado en las redes y retuiteado por miles de personas. En él, aparecen dos hombres, uno de ellos con un arma que dispara contra las imágenes de estos políticos y las hace caer.

En abril de 2019 vecinos del pueblo de Coripe (Sevilla) realizaron un fusilamiento simulado de Puigdemont coincidiendo con la Semana Santa, y lo equipararon a Judas. Los vecinos iban provistos de armas de fuego, y munición de fogueo. No prosperó ninguna investigación de los hechos, porque la Fiscalía no vio ningún delito de odio ni ninguna discriminación de ninguna ideología.