El president en el exilio y candidato de Junts a la presidencia de la Generalitat para el próximo 12 de mayo, Carles Puigdemont, ha apostado para que el independentismo gobierne si obtiene "una mayoría simple, pero lo suficiente sólida". Así se ha pronunciado en una entrevista de este martes en El Punt Avui al ser preguntado por un posible escenario de repetición electoral si el independentismo no consigue la mayoría absoluta y, si bien ha rechazado descartar cualquier opción, ha admitido que "no sería una buena noticia" por Catalunya.

"Se ha gobernado Catalunya con 33 diputados --en referencia al actual Govern de ERC-- y creo que el independentismo sumará bastante más que eso, y si no tenemos mayoría nos acercaremos mucho. No podemos perder la oportunidad", ha sostenido Puigdemont. Con respecto a una posible unión de las mesas de negociación de ERC y Junts con el PSOE, ha asegurado que si preside el Govern se dedicará "desde el primer minuto a rehacer la unidad", y ha planteado consensuar el liderazgo de la parte catalana.

De esta manera, ha apostado para llegar a un "acuerdo político con otras fuerzas políticas, y con ERC por descontado" para potenciar la parte catalana en la negociación llevada a cabo en Suiza, la cual cree que tendría que estar encabezada por la presidencia de Catalunya.

Al ser preguntado por las críticas del resto de partidos hacia su candidatura que acusan de personalista, Puigdemont ha respondido que lo que necesita Catalunya en estos momentos es liderazgo: "Probablemente, es eso lo que les moleste. No creen que en este momento Catalunya necesita liderazgo, y eso es exactamente el contrario lo que yo pienso". Asimismo, ha argumentado que si hubiera antepuesto el aspecto personal, se habría presentado a las elecciones europeas, ya que como candidato al Parlamento Europeo "se está más tranquilo y no está sometido en la coctelera que representa, ahora mismo, ser candidato a la presidencia de la Generalitat".

Puigdemont reivindica la inmersión

Puigdemont también se ha referido al estado del catalán, sobre el cual ha considerado que hay un "problema gravísimo". El presidenciable de Junts no ha dudado a asegurar que la situación es "una emergencia nacional", y ha subrayado que las luces de alarma "están puestas en marcha de hace tiempo", a la vez que ha lamentado que el Govern no los ha atendido. Combatir la situación no pasa, según su opinión, para cambiar el modelo de la inmersión lingüística, "una buena metodología para la cohesión social", sino para aplicarlo bien. No nos podemos permitir que haya bolsas en el país que ignoren completamente el catalán. Si eso pasa no es culpa del modelo, es culpa de la aplicación del modelo. Y es evidente que el modelo no se aplica. Y es evidente que no se hace respetar la lengua catalana empezando por algunos medios públicos y por algunos actores públicos", ha opinado, sin señalar nombres concretos.

"No podemos cargar la responsabilidad a los maestros, solo", ha profundizado. "Tienen su responsabilidad, pero no puede ser que aquello que se hace en la escuela se deshaga en la calle, o mirando un medio público, u oyendo un líder independentista en el Congreso que pudiendo utilizar el catalán utiliza otra lengua", ha remachado.