Junts prepara en Bruselas las negociaciones con ERC de cara a la constitución del nuevo Govern. Carles Puigdemont y Laura Borràs, número uno y dos de la candidatura, han subrayado a través de un comunicado la importancia de que en las elecciones del domingo pasado el independentismo haya superado el 51% de los votos. "Consideran que este resultado favorecerá la creación de un gobierno independentista en la Generalitat que aplique este mandato electoral", añade la nota de prensa en un claro mensaje dirigido a las filas republicanas.

Los responsables de Junts responden así a los movimientos de la lista de Pere Aragonès que ha primado las conversaciones con la CUP para abrir las negociaciones en un gesto claro hacia la lista de Borràs.

Waterloo

Además, con el comunicado, Puigdemont ha dejado claro que mantendrá un papel protagonista en las conversaciones y que los acuerdos se están diseñando desde Waterloo. El texto, de seis rayas, asegura que el cabeza de lista y la presidenciable se han reunido para "hacer una valoración a fondo de los resultados electorales y preparar la negociación sobre el futuro gobierno de la Generalitat".

El responsable del grupo de ERC en el Congreso de los Diputados, Gabriel Rufián, reclamó ayer desde la tribuna de la cámara a la CUP y a los comunes llegar a un acuerdo, en el cual no incluyó a Junts. De hecho, apeló a que "dejen de marcar el ritmo aquellos que pensaban que habían ganado tanto que pensaban que el país era suyo".

Estos movimientos de los republicanos se han interpretado desde Junts como puramente estratégicos y fuentes de la formación aseguraban el martes que no les influirá y serán "enormemente pacientes".

No obstante, Puigdemont y Borràs han lanzado un primer mensaje desde Bruselas antes de esperar a que llegara alguna propuesta concreta desde la sede de los republicanos.

Lo han hecho justo el día en que la ANC ha reclamado a los partidos independentistas que tengan en cuenta que por primera vez se había superado la barrera del 50% y respondan con "responsabilidad".

 

En la imagen principal, Carles Puigdemont y Laura Borràs en una imagen de archivo / ACN