El PSOE ha blindado de la mano del PP la Constitución de cualquier otra modificación que no sea la de dignificar a las personas con discapacidad. Así, los socialistas han tumbado en la Mesa del Congreso las enmiendas ajenas a esta cuestión, de forma que han enviado a la papelera la petición del PNV de incluir en la Carta Magna el derecho a la autodeterminación del pueblo vasco, así como la de eliminar el artículo 155. También han fulminado las dos enmiendas que ha presentado Sumar. Una de estas dos estaba impulsada por Compromís, con el fin de reconocer el derecho civil valenciano que el Tribunal Constitucional anuló del estatuto autonómico, y otra de Més con el fin de otorgar a la isla de Formentera un senador propio; en vez de lo que comparte con Eivissa. Fuentes de Compromís explican a ElNacional.cat que estudian la forma de recurrir ante la justicia la decisión de tumbar las enmiendas, convencidos de que cualquier petición de modificación se tiene que poder hacer caer en el pleno, y no en la Mesa.

Una de las principales reivindicaciones de los jeltzales tenía que ver con el derecho a decidir. El PNV quería crear una nueva disposición adicional que fijara que "la plena realización de los derechos históricos del pueblo vasco, como manifestación institucional de su autogobierno, se exterioriza a través del derecho a decidir de su ciudadanía, libre y democráticamente representada, siendo su ejercicio pactado con el Estado". Asimismo, la formación liderada en el Congreso por Aitor Esteban quería reformar el artículo 2 de la Constitución con el objetivo de cambiar el término "nacionalidades" por "naciones" y eliminar la referencia a la "indisoluble unidad de la Nación española, patria común e indivisible de todos los españoles".

Las enmiendas de los nacionalistas vascos, sin embargo, no acababan aquí. También propusieron limitar la inviolabilidad del rey, que se suprimiera el artículo 155 de la Carta Magna, y descentralizar el poder judicial. También abogaban por eliminar la defensa de la "integridad territorial y el ordenamiento constitucional" de las funciones de las Fuerzas Armadas, ya que son dos cuestiones que, en una democracia, "se tutelan por los tribunales de justicia".

Reforma del artículo 49

El argumento que dan las fuentes socialistas consultadas con el fin de tumbar estas propuestas de modificación de la Constitución es que las enmiendas presentadas no se ajustaban a la reforma del artículo 49 de la Constitución. Este martes, la cámara baja apretó el acelerador para reformar la Carta Magna por tercera vez en la historia con el objetivo de eliminar el término "disminuidos" y actualizar así "la protección de los derechos de las personas con discapacidad". Es una modificación pactada entre el PP y el PSOE, en uno de los pocos acuerdos de los últimos tiempos que se recuerda entre los dos partidos, y largamente reivindicada por el CERMI (el Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad).

La cámara baja acordó su toma en consideración por 315 votos a favor y 33 abstenciones (de Vox). Se decidió también tramitarla por lectura única, cosa que comprime al máximo los plazos: este martes superó el primer examen parlamentario y el jueves recibirá luz verde y se enviará al Senado para aprobarse definitivamente y publicarse en el Boletín Oficial del Estado. Durante el debate, los partidos independentistas habían aprovechado para aludir a la Constitución en su totalidad y denunciar los obstáculos permanentes que hay para reformarla.