El PSOE ya ha registrado en el Congreso la moción de censura contra Mariano Rajoy presentada después de la sentencia del caso Gürtel. La moción se ha presentado antes de tiempo ya que hasta las 11 de la mañana no había prevista una reunión extraordinaria de la dirección del partido convocada por el secretario general, Pedro Sánchez. En este encuentro se tenía que analizar la posibilidad de presentar la moción pero parece ser que el grupo parlamentario socialista se ha avanzado y ha hecho efectiva la presentación de la moción.

La estrategia del líder socialista es la urgencia. Sánchez pretende mostrar la necesidad de un cambio en La Moncloa que podría producirse antes del mes de junio si consigue el apoyo necesario. La moción necesita 176 votos para prosperar; con el apoyo de Unidos Podemos y Ciudadanos tendrían 184 votos. En caso de que Cs no se sumara a la propuesta, Pedro Sánchez necesitaría los votos de los independentistas catalanes, el PNV, Bildu y Compromís (además de Podemos).

Miembros del equipo de Sánchez señalaban este jueves por la tarde que en este debate es vital el criterio y las opiniones de los líderes territoriales y de los miembros de la ejecutiva del partido, aunque en las puertas de Ferraz el portavoz del PSOE, Óscar Puente, ha afirmado que la opinión de la ejecutiva está "muy alineada" con Sánchez.

El líder de los socialistas españoles ya mantuvo este jueves conversaciones con buena parte de los barones socialistas, que lo ven también como una herramienta de relanzamiento de cara a las elecciones autonómicas y locales del próximo año. El primer secretario del PSC, Miquel Iceta, ha dado pleno apoyo a Sánchez en un tuit esta mañana y ha hecho un llamamiento a "ofrecer una alternativa de progreso para España".

El PSOE aborda la iniciativa después de 24 horas de silencio desde la publicación de la sentencia que condena el PP por Gürtel. Este jueves los servicios de prensa del PSOE se habían limitado a apuntar en un brevísimo comunicado que "el PSOE considera inaceptable la respuesta del PP y el gobierno ante la sentencia del 'caso Gürtel' que implica políticamente el presidente del gobierno y del PP, Mariano Rajoy".

Su silencio va contrastado con la reacción del líder de Podem, Pablo Iglesias, que instó al líder del PSOE a presentar la moción de censura que el portavoz del PDeCAT en el Congreso, Carles Campuzano, ya ha adelantado que apoyaría. También con las manifestaciones de Albert Rivera, que amenazó con romper el apoyo de su formación en el gobierno de Mariano Rajoy a la vez que recordó que tiene que actuar con "responsabilidad" para evitar que los independentistas "se aprovechen de la debilidad" del Estado.

A la hora de impulsar la moción de censura, el líder del PSOE chocará nuevamente con las limitaciones que los barones impusieron al Comité Federal de diciembre del 2015 en que se vetó la posibilidad de alcanzar acuerdos con las fuerzas independentistas. Una opción que si se afianza ahora tan sólo deja abierta la posibilidad de un acuerdo transversal con Podemos y Ciudadanos al mismo tiempo, justo después de que el partido de Rivera haya dado apoyo a las cuentas de Rajoy.