El PSC cree que el president en funciones, Carles Puigdemont, se apartará ante la imposibilidad de repetir como president con una investidura telemática. Así lo ha comunicado el líder de los socialistas catalanes, Miquel Iceta, que se ha mostrado convencido que el futuro Govern no contará ni con el president ni con el vicepresident, Oriol Junqueras.

En una entrevista a El Matí de Catalunya Ràdio, Iceta ha invitado al president a retirarse de la reedición en la presidencia de la Generalitat porque, según ha considerado, las causas judiciales le imposibilitan seguir en el cargo. "Se tienen que escoger personas que puedan hacer su trabajo", ha asegurado Iceta, que ha sugerido al president que siga el camino de Artur Mas y Carme Forcadell, que han abandonado sus funciones al PDeCAT y a la presidencia del Parlament respectivamente por la judicialización del procés.

Iceta también ha reiterado que el PSC impugnará una posible investidura telemática de Puigdemont al Tribunal Constitucional. Y es más: el líder de los socialistas ha advertido que su formación no iría al Parlament para el debate de investidura: "No participaremos en un debate de una persona que no está. Lo haremos desde casa".

De esta manera, los socialistas se alinean con Ciudadanos al rechazar la investidura a distancia con Puigdemont en Bruselas. Ayer, ambos partidos ya anunciaron que emprenderían acciones legales en el supuesto de que los independentistas apostaran por esta vía, y hoy Iceta ha vuelto a incidir: "Una cosa son los deseos y la voluntad política, y otra cosa es la norma", ha sentenciado el socialista.

Advertencias futuras

Iceta ha exigido que el futuro Govern respete la ley y se aleje de la vía unilateral porque todavía está la amenaza de la aplicación del 155. "Puede volver a haber una intervención del Estado", ha advertido el líder de los socialistas, que ha lamentado que los independentistas no hicieran caso a las advertencias de su grupo en la legislatura pasada. "Fracasamos. No hicieron caso a nuestras advertencias", una situación que ahora ha querido revertir con un consejo al futuro ejecutivo, que pasa por respetar la legalidad y la Constitución sin abandonar la que considera una causa legítima, la independencia.