El Gobierno español ha expresado a TV3 un "profundo malestar" por haber emitido este mediodía el discurso del president Carles Puigdemont, porque entiende que no se ha contemplado su tesis en el sentido de que el mandatario catalán ha sido destituido.

La Moncloa también se ha molestado porque en los cairons de la televisión catalana han seguido definiendo a Puigdemont como president.

Puigdemont ha dejado claro durante la intervención que no se considera destituido por el Consejo de Ministros y ha hecho un llamamiento a la oposición democrática al artículo 155, que suspende el autogobierno.

El president ha grabado el mensaje desde la Delegació del Govern en Girona. "Tenemos claro que la mejor manera de defender las conquistas alcanzadas hasta hoy es la oposición democrática a la aplicación del artículo 155", ha asegurado, y ha descrito la activación de este artículo como una "agresión premeditada a la voluntad de los catalanes que de manera muy mayoritaria y a lo largo de muchos años nos hemos sentido nación de Europa".