Algunos de los presos políticos independentistas han empezado a buscar trabajo fuera de la prisión a la espera de que las juntas de tratamiento los clasifiquen en segundo o tercer grado, según ha avanzado este miércoles TV3. Según el reglamento penitenciario, una vez clasificados, los presos seguirían cumpliendo la pena que se les ha impuesto, pero podrían trabajar fuera de la prisión unas horas al día como parte del proceso de reinserción social.

La sentencia del Tribunal Supremo, que les inhabilita para trabajar en el sector público, hace que el ámbito de búsqueda de los presos se limite al sector privado. Esta situación hace que Oriol Junqueras, que era profesor en la Universitat Autònoma de Barcelona, o Jordi Sànchez, que había estado adjunto al síndic, no puedan volver a acceder a estos puestos de trabajo. Por su parte, Joaquim Forn y Josep Rull prevén enfocarse directamente al sector privado.

También hay opciones más allá del mundo empresarial, como hacer tareas de cuidado de familiares mayores o programas de voluntariado, alternativa que contemplan otros de los presos.

Por ahora, según fuentes próximas a los presos, no hay ninguna oferta ni ninguna propuesta en firme encima de la mesa, pero sí una actitud proactiva por su parte para buscar oportunidades.