El presidente de Aragón, Javier Lambán, ha escogido un escenario bien especial, además de polémico, para pronunciar el discurso de Fin de Año. Ni más ni menos que el Monasterio de Sijena, según informa el Periódico de Aragón.

El espacio es muy simbólico por la batalla judicial y política que hace unas semanas obligó a trasladar las obras que estaban en el Museo de Lleida al Monasterio de Sixena, propiciado además por la aplicación del artículo 155 de la Constitución en Catalunya.

El mensaje del presidente aragonés se podrá ver este mediodía, a las dos y media de la tarde, por la televisión de Aragón.