El Partido Popular se ha disculpado este lunes por el caos en la autopista del AP-6 de este fin de semana, debido al temporal de nieve que mantuvo a centenares de personas atrapadas en la vía, aunque ha huido de toda crítica a la gestión de Fomento. El coordinador general Fernando Martínez Maíllo ha asegurado que la culpa del colapso sería de la concesionaria de la carretera, y no del ministerio dirigido por Íñigo de la Serna, o de la DGT, ya que a su parecer, el papel del ejecutivo pasa por rescatar a la gente y no por dirigir una vía privada "nada barata".

"Nos solidarizamos porque lo entendemos. No es lógico que estén tantas horas encerrados con familias y niños. La gente no tiene que comprender de quién es el error, pero algo ha fallado", se ha excusado Maíllo, quien ha reconocido que él mismo suele transitar esa carretera. Asimismo, este ha evitado responsabilizar a los conductores, como sí hizo el jefe de la Dirección General de Tráfico, Gregorio Serrano. El hecho es que el PSOE sí exige la dimisión de Serrano, en paralelo a que Podemos y Ciudadanos pidan comparecencias de los ministros de Interior y Fomento en el Congreso.

Precisamente, Maíllo ha tenido que justificar por qué era diferente el caso de De la Serna del de Magdalena Álvarez, ministra homóloga en tiempo de José Luis Rodríguez Zapatero, de quien el presidente Mariano Rajoy sí pidió la dimisión entonces. En opinión del coordinador general, aquello sucedió en una autopista de titularidad pública, mientras que el caos del fin de semana afectaba a una privada. Eso ha sido motivo de rechazo de los socialistas, quien han aprovechado la excusa para denunciar un posible descontrol de las vías de movilidad privadas del Estado.