La mezcla entre la sentencia contra los líderes independentistas catalanes y la precampaña electoral es explosiva y envenenada. Con una Catalunya con protestas en la calle, día sí día también, más de una de las cuales ha acabado con incidentes, los estrategas de los grandes partidos españoles miran de sacar su rédito particular de la situación.

A lo largo de las últimas horas, la sede del en Prefactura de la Policía Nacional de la Via Laietana de Barcelona se ha convertido en escenario de campaña, con un desfile de los máximos representantes de tres de los grandes partidos españoles, PSOE, PP y Cs.

El más madrugador ha sido Pedro Sánchez, que oficialmente ha asistido como presidente del gobierno en funciones. Pero es evidente que el sombrero de candidato del PSOE cuando quedan sólo 20 días para las elecciones del 10-N es indisociable. La visita no se ha anunciado de entrada, para que la prensa no pudiera informar con suficiente margen y evitar así que se organizara una concentración contra Sánchez. Eso sí, Moncloa ha ido publicitando cada una de las paradas de la visita del presidente -y candidato- difundiendo toda una serie de vídeos. Hablando con agentes, fotografiándose con heridos.

Teresa Cunillera Pedro Sánchez Prefertura Policia EFE

Poco después del paso de Sánchez por la Prefactura han llegado los líderes de Ciutadans en Catalunya, encabezados por Lorena Roldán y Carlos Carrizosa. Hoy no estaba Albert Rivera, que ya se pasó el domingo. De hecho, la propia Roldán ha recordado a los periodistas que ya hace tres días que vienen a dar apoyo al cuerpo.

ELNACIONAL Lorena Roldán Cs decomisaría policía Via Laietana Sergi Alcàzar

El último de hacer la visita de rigor ha sido Pablo Casado. Se ha esperado que se marcharan los de Cs. Le han acompañado a Cayetana Álvarez de Toledo, Alejandro Fernández y Josep Bou, la plana mayor del partido en Catalunya. El presidente del PP, como han hecho Roldán y Carrizosa, se ha abrazado con los agentes y ha conversado en las puertas, asegurándose de que las cámaras captaban todos los detalles. Antes se ha dirigido a los medios de comunicación presentes para dejar claro que él "habría cogido el teléfono a Torra". Eso sí, sólo para decirle que rompe todos los pactos de los socialistas con JxCat a nivel municipal.

Ninguno de ellos ha podido entrar en el interior del edificio. Desde protocolo de la Prefactura han explicado a este diario que no se permite el acceso a ningún político en representación de su partido.