Los diarios se han soltado. En las portadas, la negociación entre el PSOE y ERC para la investidura (o no) de Pedro Sánchez es una subasta de titulares, a cual más bestia. No en todos los diarios, claro. Hay algunos que no especulan ni fantasean. Pero la caverna madrileña es un festival. Todo hace pensar que se lo inventan para presentar el acuerdo de la forma más espantosa posible, porque no hay manera de saber en qué fuentes basan sus titulares. Juegos malabares.
ABC dice que los republicanos piden a los socialistas lo mismo que querían conseguir con el referéndum del 1-O —pero por la cara, sin manis masivas y pacíficas, ni urnas chinas, ni censo universal...— y, además, la libertad de los presos políticos y el regreso de los exiliados. El titular de portada de mañana podría ser "Esquerra pide además ¡dos huevos duros!" En fin. La Razón revela que Pedro Sánchez se cargaría a la fiscal general del Estado porque, viene a decir, Esquerra quiere vengarse y porque pide un perfil "más flexible". El Mundo, un poco más razonable, ha descubierto que el cambio de cromos es otro: la abstención de ERC vendría de constituir una comisión Estado-Generalitat en el Congreso para tratar del "conflicto político" (este diario lo escribe siempre entre comillas, como queriendo decir que ellos de ninguna manera aceptan este concepto intolerable).
Tendría gracia que Esquerra lograra todas las peticiones que le atribuyen. Sería la demostración fehaciente de que el procés, el referéndum, el 155, la represión, el juicio, los exiliados, los presos políticos, etcétera, habrían sido del todo inútiles y que el conflicto se podía resolver con un sit and talk. Si ahora mismo se te ha quedado cara de ¿Pero-Qué-Dice-Este-Hombre?, significa que esas portadas pretenden únicamente ridiculizar y/o deslegitimar las negociaciones y situarlas —¡sacrilegio!— fuera del "Estado de derecho y el imperio de la ley".
