Las portadas de los diarios impresos de Barcelona vuelven a presentarse en dos, digamos, bandos. El Periódico, La Vanguardia y Ara consideran que Catalunya debe saber todo aquello que le afecta aunque se haya decidido en Madrid —en la sede del ejecutivo y/o del legislativo del Estado. El Punt Avui no lo ve así. Al menos en portada. Los tres primeros abren con el acuerdo entre patronales y sindicatos españoles para aumentar los salarios un 10% en tres años. Técnicamente no está hecho, cierto. Hay que acabar de escribirlo y que lo aprueben los llamados "agentes sociales". Además, el titular es engañoso porque se trata de un acuerdo general que después hay que sustanciar en cada negociación colectiva, por sectores y empresas. Vaya, que no afectará a todos los trabajadores de la misma manera. De todo esto El Punt Avui no dice nada en primera página, aunque afecte a casi todos sus lectores.
El acuerdo para subir los salarios es una noticia te lo mires como te lo mires, te guste o no. Lo es más que la coronación de Carlos III como rey del Reino Unido de Gran Bretaña y de Irlanda del Norte. Que El Mundo y La Razón no digan ni palabra en portada no solo significa que no les ha gustado nada. También quiere decir que la proporción de fanatismo antigubernamental en uno y otro diario ha alcanzao proporciones tóxicas próximas a la desinformación. Esta semana tampoco les apeteció publicar en primera los buenos datos de empleo. Y si lo hacen, procuran ensuciarlo. El Mundo abre diciendo que España ha recuperado el PIB de antes de la pandemia, pero aclara en el subítulo que "es el último país de la Eurozona en regresar al nivel de 2019". Al lado, una entrevista con el secretario general del PSOE de Andalucía titulada "Pactar con ERC y Bildu ha valido la pena plenamente", un recordatorio de que, con buenos o malos datos económicos, el gobierno español es tan indeseable como siempre porque busca el apoyo de separatistas y terroristas, según su código particular. Incluso ABC lleva como noticia principal del acuerdo sobre los salarios.
De ABC inquieta comprobar la relación enrevesada y abrupta de este tabloide monárquico con el concepto de libertad. El diario se escandaliza de que EH Bildu haya alquilado unas (o una, no se explica) vallas publicitarias cerca del estadio de La Cartuja, en Sevilla, para animar al Club Atlético Osasuna de fútbol, que este sábado juega la final de la Copa del Rey contra el Madrid. "Bildu se cuela en la fiesta del fútbol español", titula el diario con un deje de indignación patriótica. A ver, que Bildu es un partido político legal y parte de la actual mayoría gubernamental. Lo de la valla es una curiosidad, claro, porque es extraño que un partido apoye a un equipo de fútbol —pero tiene todo el derecho a hacerlo. ¿Qué diría ABC si EH Bildu enviara un comunicado con la foto de un quiosco de Gernika donde venden el diario diciendo "ABC se cuela en la vida de Euskadi?" Ha perdido mucho este diario, sobre todo sentido del humor.
