El prestigioso semanario Politico dedica la portada de su edición en papel, aparecida este jueves, en España. How Spain went woke – and why that may not last (Cómo España se convirtió en woke y por qué eso podría dejar de ser así) es el titular de portada en que aparece una ilustración que representa la fachada de un bar de vinos rodeada de motivos políticos relacionados con la izquierda, el feminismo y los derechos LGBTI. La ilustración muestra como una persona empieza a tapar todos estos símbolos con propaganda del partido de extrema derecha Vox.

 

 

El semanario hace un relato sobre la rápida evolución que ha hecho España los últimos años con respecto a la consecución de derechos de colectivos minoritarios o marginados históricamente. El medio recuerda las duras condiciones que la dictadura de Francisco Franco había ofrecido a los colectivos más susceptibles a ser discriminados. España evolucionó en el terreno moral, situándose al frente en el reconocimiento de derechos, por ejemplo, al colectivo LGBTI, con el derecho al matrimonio homosexual del 2005 como hito destacado durante el gobierno del socialista José Luis Rodríguez Zapatero.

El reportaje resalta que, según una encuesta de YouGov del 2021, el 91% de las personas que fueron consultadas en España darían apoyo a su hijo, hermano o familiar próximo si se declarara gay, lesbiana o bisexual. Además, un 89% aseguraba que la homosexualidad tenía que ser aceptada por la sociedad. Con estos datos, Politico refuerza la idea de una España que ha cambiado en contraste con un país dominado durante décadas por un régimen ultracatólico.

Una coalición con "caos"

El medio, que presenta varias entrevistas a políticos como Carla Antonelli y profesores universitarios, sostiene que está por ver si los avances que han conseguido el gobierno de coalición entre PSOE y Unidas Podemos son lo bastante sólidos ante un cambio de atmósfera a favor de postulados más conservadores. Politico no ofrece una buena imagen del gobierno entre socialistas y morados y apunta que se han originado episodios de "caos", como es el caso de los cambios legislativos de la ley del solo sí es sí y los efectos negativos que han tenido con respecto a la revisión de condenas.

La revista también apunta que la actitud de la ministra de Igualdad, Irene Montero, ha sido poco humilde y que contrasta con cómo el gobierno de Zapatero encajó a las críticas de aquellos que no estaban de acuerdo con el matrimonio homosexual. Politico sostiene que si bien en aquel momento el presidente socialista respondió a las críticas tomando con respeto la diversidad de opiniones, el sector de izquierda radical dentro del Gobierno actual ha cogido la crítica con formas más agresivas, sin reconocer errores y vinculando, por ejemplo, los efectos de la ley del solo sí es sí al "machismo" de los jueces. Esta situación de choque y polarización podría allanar ahora el camino a sectores conservadores (centroderecha y extrema derecha) y eso podría implicar una regresión en algunos ámbitos, avisa el semanario.