El Parlament de Catalunya ha celebrado este martes el primero de los tres debates monográficos que se celebrarán a lo largo de las próximas semanas en la cámara, y que estaba centrado en el modelo energético y las políticas relativas a esta cuestión. El pleno, que se ha hecho a propuesta del PSC y Junts (habían registrado las peticiones por separado), ha constatado las divergencias entre el Govern y los partidos de la oposición sobre el modelo energético y hasta qué punto el país ha avanzado en la transición verde o la implementación de las energías renovables. Mientras que, desde el ejecutivo, el president Pere Aragonès y el conseller David Mascort han destacado que se está haciendo los deberes, que se está avanzando mucho en autoconsumo o que se están dando "pasos adelante sin precedentes" en renovables, los grupos parlamentarios han discrepado de estos avances y reclaman un "giro de 180 grados" en las políticas energéticas. De hecho, la oposición sostiene que, en caso de seguir esta tendencia, no será posible cumplir con los objetivos fijados para el 2030 (que el 50% de energía producida sea verde) y para el 2050 (neutralidad en emisiones y descarbonización completa).

Desde el PSC, la diputada Sílvia Paneque ha criticado que el ejecutivo no trabaje "de manera incansable" en avanzar en la transición verde teniendo en cuenta la crisis climática. La socialista ha reprochado que la energía generada y consumida en Catalunya el año 2022 fue más sucia y poco renovable que el año anterior y ha diagnosticado que la situación es de un "dominio absoluto" del carbono y de "dependencia exterior absoluta". En este sentido, los socialistas reclaman al Govern  una "aceleración del ritmo" en proyectos estratégicos sobre energía, apuntando que los objetivos marcados para el 2030 y 2050 parecen, hoy por hoy, difíciles de alcanzar: "Para el 2050, solo hemos recorrido el 5% del camino", ha señalado Paneque.

Por parte de Junts per Catalunya, el presidente del grupo parlamentario, Albert Batet, ha aseverado que "el modelo energético condiciona el modelo de país" y ha reivindicado aprovechar el debate para apostar por un "modelo de país energético propio, libre de ciertos oligopolios y libre de la regulación del Estado". También ha intervenido el diputado Ramon Tremosa, que ha defendido que existe la oportunidad de ser "autosuficientes energéticamente hablando" y ha hecho referencia a las "potencialidades" que puede tener Catalunya en este terreno, como el impulso de grandes baterías reversibles. En todo caso, Tremosa ha lamentado que también hay "tropiezos", como "el monopolio de Red Eléctrica" o cuellos de botella administrativos.

El Govern reivindica que Catalunya es el territorio del Estado con más instalaciones de autoconsumo

En el marco del debate monográfico sobre energía, por parte del Govern ha intervenido el president de la Generalitat, Pere Aragonès, y el conseller de Acció Climàtica, David Mascort. Aragonès ha afirmado que, en materia energética, hay que actuar con "decisión, valentía y sin dilaciones", una manera de hacer que —ha dicho— ya se está aplicando. "No hay más tiempo ni oportunidades a perder, la transición verde no tiene traba", ha subrayado el president. Pere Aragonès ha destacado que Catalunya es el territorio del Estado con más instalaciones de autoconsumo y ha reivindicado que se han "desencallado" más de 100 proyectos de producción de energías renovables: "Queda mucho camino por recorrer, pero se ha girado la inercia".

Por su parte, el titular del Departament d'Acció Climàtica, David Mascort, ha indicado que "llegar a 3.000 megavatios a finales de legislatura no es utópico", a la vez que ha pedido al Estado "lealtad y respeto" por el modelo energético catalán, criticando que se apueste por líneas de muy alta tensión sin tener en cuenta el territorio. Todavía desde ERC, el diputado Eugeni Villalbí ha cargado contra los discursos de algunos grupos parlamentarios y ha sostenido que estos "no desgastan al Govern, sino que desgastan al país".

El diputado Dani Cornellà, de la CUP, ha alertado de que "el modelo económico y social sigue avanzando con el mito del crecimiento infinito, produciendo y consumiendo sin pensar que eso nos lleva hacia la tragedia colectiva". Los cupaires han apuntado que no tiene que dar miedo un "decrecimiento de la contaminación" para poder llegar a un "marco ecológicamente sostenible" que permita un "crecimiento democrático de verdad". Y los comunes han disparado contra Junts per Catalunya por haber hecho "poco" durante los años que gestionaron estas competencias. David Cid ha criticado que "se ha regalado la soberanía energética de Catalunya" por la dependencia con Aragón y que se ha "perdido el tren de las renovables". Los comunes dudan que se pueda alcanzar el objetivo de 2030 en materia de energía eólica: "O hay planificación ecológica o vamos al caos".