La presencia de mandatarios de todo el mundo con motivo de la celebración de la Asamblea General de las Naciones Unidas ha complicado la circulación por las calles de Nueva York. Pero la policía de Manhattan tiene muy claras cuáles son sus prioridades. Así lo ha podido constatar el presidente francés, Emmanuel Macron, que ayer por la noche vio como los agentes bloqueaban su vehículo para dejar libre el paso para la comitiva del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump. La imagen fue captada en un vídeo que ha publicado el medio francés Brut en Instagram, en qué se ve el jefe del Estado francés hablando fuera del vehículo con un agente que se disculpa explicándole que está todo parado para permitir la circulación del vehículo de Trump. Acto seguido, se ve Macron hablando, aparentemente, con el presidente de los Estados Unidos.
Macron había intervenido horas antes en la sede de la ONU en una reunión de alto nivel anunciar la decisión de reconocer el estado de Palestina. "Ha llegado el momento", argumentó el político francés para explicar una decisión que choca frontalmente con la política de Trump en este tema, y que se alinea con otros países que también se han pronunciado en este sentido con motivo de la Asamblea General como Reino Unido, Australia, Canadá o Portugal.
Por la noche, una vez acabada la reunión, y mientras circulaba por las calles de Nueva York, el vehículo del presidente francés se encontró bloqueado por el dispositivo de seguridad monta para permitir la circulación de la comitiva que trasladaba al presidente de los Estados Unidos. En el vídeo se ve como Macron, fuera del vehículo, pide explicaciones a un agente. "Lo siento mucho, señor presidente, todo está bloqueado en este momento", le explica el policía visiblemente inquieto ante la situación de impedir el paso a un jefe de Estado.
Acto seguido aparece Macron conversando por teléfono, supuestamente con Trump. "¿Cómo está? ¿Adivina qué? Estoy esperando porque todo está cerrado por ti", le explica, aparentemente divertido ante una situación sin duda embarazosa y que desborda cualquier planteamiento protocolario o de logística de seguridad. De poco, sin embargo, le sirvió la llamada. Finalmente, se desbloquea la circulación, pero solo para los peatones y no para los vehículos, por lo cual la comitiva francesa tiene que continuar el camino a pie. Fue un paseo de 30 minutos durante los cuales algunos peatones aprovecharon para hacerse selfies.