La megafonía del Ayuntamiento de Vic difunde un mensaje que denuncia la situación de presos políticos y exiliados cada día a las 8 de la noche. El mensaje insta a "no normalizar una situación de excepcionalidad y de urgencia nacional. Recordamos cada día que todavía hay presos políticos y exiliados" y pide que "no nos desviemos de nuestro objetivo, la independencia de Catalunya".
La locución se escucha después del toque de somatén. La iniciativa ha sido impulsada por el equipo de gobierno municipal, la ANC, Òmnium Cultural y los CDR. Desde la oposición, el grupo municipal de Vic para Tots, con un concejal, califica la iniciativa "de exagerada" y piden al consistorio que deje de reproducirla.
La plaza Major de Vic, con pancartas a favor de la liberación de los presos políticos y exiliados, emite el mensaje por la noche después del repique de las campanas. El Toque de somatén alerta a los vecinos de que después escuchan el mensaje. Según manifiestan desde el ayuntamiento, el toque se reproduce desde Navidad y el mensaje se ha incorporado hace unos días con el objetivo de recordar la situación política anómala que vive el país en relación con la vulneración de derechos políticos y civiles.
Pleno municipal en septiembre
A pesar de mostrarse contrario al encarcelamiento de los políticos, el portavoz de Vic per Tots, Arnau Martí, asegura que "no es procedente que se utilice este canal". "Entendemos que en el espacio público todo el mundo puede expresarse como quiera, pero utilizar la megafonía y el toque del somatén me parece exagerado", denuncia, haciendo un llamamiento a "retirarlo". Según su opinión, este tipo de actuaciones lo que consiguen es "generar más crispación".Martí ya ha pedido al equipo de gobierno "sentido común" y que deje de abusar de un instrumento municipal que se utiliza en momentos de alarma (en relación con el toque del somatén)". Con respecto al mensaje opina que "hace apología del independentismo y me parece que es pasarse de la raya". En caso de que el mensaje se siga emitiendo, tiene intención de exigir su retirada en el pleno municipal del próximo mes de septiembre.