No, el candidato de Bildu a las elecciones vascas del 21 de abril no es Arnaldo Otegi. El coordinador general del partido anunció el pasado 27 de noviembre la decisión de dar un paso al lado y dejar que alguien más encabece la candidatura del 21-A. El escogido es Pello Otxandiano, abertzale de nueva generación de 40 años. Aunque es un desconocido para muchos vascos, ha sido hasta ahora una figura relevante dentro de la dirección del partido. Ha sido, de hecho, el ideólogo; en tanto que ha dirigido el área de programas de la coalición de formaciones nacionalistas de izquierdas de Euskal Herria. Se presenta al 21-A con un gran objetivo: iniciar en el País Vasco un cambio de ciclo haciendo realidad el sorpasso de Bildu al PNV.

Otxandiano fue miembro de Sortu hasta 2021, donde tuvo la misma función que ha tenido hasta ahora en Bildu. Entre 2011 y 2015 fue concejal en Otxandio, el pueblo de Bizkaia donde nació en 1983. Se trata de la única participación pública que ha tenido nunca en política. Su trabajo se ha centrado siempre en trabajar entre bambalinas. A menudo se hace referencia a este candidato como "el tecnólogo e ideólogo de Bildu". A Pello Otxandiano la inquietud por la política le nació de bien pequeño, cuando supo que su bisabuelo y los dos hermanos de su abuela materna murieron en 1936 en el bombardeo de este municipio.

Es doctor en Ingeniería de Telecomunicaciones por la Universidad de Arrasate y ha realizado una estancia doctoral en la Chalmers University of Technology en Göteborg, Suecia. De hecho, su paso por los estados nórdicos ha marcado su concepción de la política y de los servicios públicos. Se le atribuyen a él iniciativas en política vasca sobre pactos educativos y, energéticos, además de sugerir un nuevo modelo de apoyo al pequeño y medio empresario para generar riqueza.

 

Padre de dos hijas, Arnaldo Otegi define a Otxandiano como un candidato solvente, comprometido con Euskal Herria; y el mejor ejemplo de que la formación busca una renovación de cara al futuro, con la esperanza de superar al PNV y convertirse en el nuevo partido hegemónico del País Vasco. Según una encuesta de EITB, la televisión vasca, el cabeza de cartel de Bildu es el candidato mejor valorado por los electores, con un 6; batallando con Imanol Pradales del PNV, con quien el día 21 tendrá que tener una ardua disputa en las urnas. Todas las encuestas coinciden en que cualquiera de los dos puede ganar los comicios de este domingo.

Objetivo: cambio de ciclo en el País Vasco

Otxandiano, pues, sucede a Maddalen Iriarte como cabeza de lista de Bildu. El objetivo de los abertzales en estas elecciones es tan complicado como plausible: conseguir un cambio de ciclo en el País Vasco convirtiéndose en la fuerza más votada del territorio. Para ponerlo en perspectiva, hay que tener en cuenta que de las 12 elecciones que se han celebrado en Euskadi desde 1980, el PNV las ha ganado todas excepto las de 1986 (unos comicios que ganó el PSE).

El Partido Nacionalista Vasco, pues, es la formación históricamente hegemónica del territorio. Ahora, sin embargo, todo puede cambiar. En las pasadas elecciones generales, PNV y Bildu quedaron prácticamente empatadas en el País Vasco (24% de los votos para los jeltzales y 23,9% para los abertzales; aunque los segundos acabaron obteniendo más votos y más escaños en total porque también se presentaron en Navarra). Dos meses antes, en las elecciones municipales del 28-M, el PNV superó a Bildu en número de votos (323.124 contra 297.154), pero los abertzales consiguieron a más concejales (1.052 contra 983).

 

Las encuestas publicadas en las últimas semanas, además, no acaban de ponerse de acuerdo sobre quién acabará ganando las elecciones del 21-A. Solo hay unanimidad en dos aspectos: quien quede segundo le pisará los talones al primero, y el PSE será la tercera fuerza de aquellos comicios. El último CIS, publicado el pasado miércoles, pronosticaba un sorpasso de Bildu al PNV en porcentaje de voto (34,2%-35,1% contra 32,6%-33,5%). El objetivo de Otxandiano es darle la razón al Centro de Estudios Sociológicos. A pesar de que en Euskadi ya se da por hecho que el próximo lehendakari continuará teniendo carné del PNV, para Bildu es importante de cara al futuro haber ganado ya unas elecciones y consolidarse como interlocutor político válido.

Otxandiano y las nuevas caras del 21-A

Otxandiano es una cara nueva en Euskadi. Pero Bildu puede estar un poco más tranquilo porque la mayoría de sus competidores también han colocado a nuevos candidatos al frente de las listas electorales. PNV, PSE y PP también tienen candidatos nuevos. Solo repiten Podemos y Vox.

Aparte de la decisión de Arnaldo Otegi de dar un paso al lado en favor de Pello Otxandiano, fue también noticia la decisión de Andoni Ortuzar de descabalgar a Iñigo Urkullu como jinete del PNV en la lehendakaritza para colocar a Imanol Pradales. Asimismo, el popular Carlos Iturgaiz ha sido sustituido por Javier de Andrés; y la socialista Idoia Mendía ha sido relevada por Eneko Andueza.