Pere Aragonès ha defendido el fichaje de Astrid Barrio para el acuerdo de claridad, ante el alud de críticas para reclutar a la politóloga unionista. En una entrevista al programa Bàsics de Betevé este lunes, el president de la Generalitat ha argumentado que se tiene que "incorporar a gente que defienda el sí y que defienda el no" — a pesar de la "vehemencia" con la que se haya defendido este 'no'. "Si queremos un mecanismo compartido (el referéndum), tenemos que escuchar aquellos que no piensan como nosotros", ha añadido, antes de dejar claro que la posición de Barrio es "absolutamente opuesta" a la suya.

La portavoz de ERC, Marta Vilalta, ya había sostenido este lunes por la mañana que la voluntad es que el consejo académico para el acuerdo de claridad sea "amplio y de consenso", a la vez que tiene que incorporar todas las sensibilidades "siempre que defiendan la lógica democrática". Así, los republicanos se han querido reivindicar: "Seguimos siendo el partido que da más miedo al Estado". Por su parte, Aragonès también ha insistido en la opción del acuerdo de claridad y ha asegurado que "la cuestión es que entre todos pactamos las condiciones en las cuales aceptaremos el resultado y que, por lo tanto, se podrá implementar".

Por su parte, Barrio ha intervenido en el programa Més 324 de este lunes y ha recordado que ella no es "antiindepedentista" — sino que lo que había defendido (y todavía defiende) es que el procés fue "chapucero". "Esta propuesta se plantea en términos de buscar un consenso más amplio. Cuantas más sensibilidades incorpore, más posibilidades hay que más gente se pueda sentir cómoda", ha manifestado.

Las elecciones municipales 2023 en Barcelona

Sobre las elecciones municipales 2023 en Barcelona, el president ha evitado decir con quién tendría que pactar ERC — trasladando la presión a las bases: "La militancia de Izquierda en Barcelona será quien decidirá los pactos postelectorales". En esta línea, se ha mostrado contento con la relación "cordial" que mantiene con la alcaldesa Ada Colau, aunque ha reconocido que "la Generalitat y el ayuntamiento tienen que intentar trabajar con la máxima sintonía".

Con respecto a la ciudad, Aragonès ha fijado el objetivo que "el 75% de los cruceros que llegan a Barcelona sean como a punto de llegada o de salida". "Es fundamental electrificar el puerto para que los barcos no quemen combustibles cuando están atracados. (...) El impuesto en las grandes embarcaciones no tiene una voluntad recaudatoria sino ofrecer los incentivos para que la flota renueve y sea más sostenible", ha añadido. Sobre el turismo, también ha dicho que "hay espacios de la ciudad que tenemos que poder regular y tenemos que apostar por el valor que aportan los turistas y no por su volumen" — en referencia a la masificación turística del Carmel. "Seguiremos trabajando para reforzar el número de efectivos de los Mossos en Barcelona", ha dicho.

La cuestión del turismo y la sostenibilidad no se acaba, de manera que el president también ha hablado sobre el aeropuerto y ha defendido tanto el aeropuerto como la titularidad: "El aeropuerto merece ser gestionado por la Generalitat, el Ayuntamiento y el Área Metropolitana. (...) El aeropuerto tiene que incrementar el número de vuelos intercontinentales, especialmente los del Pacífico, y se tiene que complementar la oferta con otros aeropuertos como el de Reus". Sobre la sostenibilidad, ha reivindicado las supermanzanas y las zonas de bajas emisiones. "La idea de las supermanzanas pega con lo que están haciendo muchas otras ciudades, pero tiene que ir acompañada de otras medidas como la mejora de Rodalies. (...) Las zonas de bajas emisiones son fundamentales y las tenemos que seguir impulsando", ha dicho en un contexto de crisis climática y de sequía. Así, sobre la sequía ha adelantado que el Govern lo tiene "todo a punto para que no haya restricciones de agua de beber en las casas".