"El tema está judicializado y en investigación y no podré hablar mucho de detalles, simplemente me limitaré a confirmar la noticia y no pasaré de aquí". Así ha corroborado en TV3 uno de los abogados de la Infanta, Pau Molins, que el sindicato Manos Limpias intentó extorsionarlos, al mismo tiempo que ha querido dejar clara "la negativa de la defensa de la Infanta a entrar en cualquier tipo de consideración en este tema porque no le hace falta".
Aunque Molins no ha querido entrar en detalles sobre cómo se produjo la extorsión, ha recordado que "nosotros mismos ya pusimos en duda que estas prácticas procesales fueran legítimas, o cuando menos nos daba lugar a dudas", y ha asegurado que, aunque no puede hablar más sobre el tema, "ya habíamos denunciado las prácticas procesales" de Manos Limpias.
También ha dejado claro que "nunca pasará que se retire la acusación a cambio de dinero" y ha explicado que "una acusación popular no tiene derecho a costas, con la acusación particular es diferente. Si consigue la condena del culpable, se le indemniza, la acusación popular está allí porque quiere".
Molins ha asegurado que el desmantelamiento de Manos Limpias "no afectará de forma automática" al juicio del caso Nóos, y ha aprovechado para subrayar que "la Infanta es inocente".
Acuerdo extrajudicial inaceptable
El abogado de la Infanta Miquel Roca ha querido sustentar las palabras de su compañero, ha asegurado que "sólo queremos una resolución judicial en este tema, los que pretendan de nosotros otra cosa han equivocado" y ha reiterado que nunca aceptaría un acuerdo extrajudicial.
"Lo que quiero que quede muy claro es que ni antes, ni ahora, ni nunca aceptaremos una solución a este tema al margen de la justicia. No contemplo, ni he contemplado nunca, ninguna solución al margen de la sede judicial y todo lo que se haga al margen será comunicado porque tengo plena confianza en la administración de justicia ", ha repetido varias veces.