"Nadie se puede enfadar porque un partido se llame demócrata". Con estas palabras, el expresident del Govern y candidato a la presidencia del Partit Demòcrata Català (PDC), Artur Mas, ha planteado en Els Matins de TV3 a Demòcrates de Catalunya que no se moleste por las semejanzas de los nombres de las dos formaciones y ha asegurado que hablarán con ellos.

Mas ha querido dejarles claro que "no había ninguna voluntad de imponer el nombre" y ha subrayado que, además, este nombre no era el que había propuesto la dirección, ni tampoco lo que él había votado, sino "el producto de un trabajo previo" en que participaban más de 10.000 personas.

En este sentido, la portavoz del Govern, y también candidata a la vicepresidencia de PDC, Neus Munté, ha puesto de manifiesto en El Món a RAC1 que ella posicionó por el nombre "Junts per Catalunya" y, aunque se ha mostrado comprensible con la reacción de Demócratas, los ha hecho saber que "todo el mundo ha podido constatar que no se ha tomado la decisión para molestar a nadie". 

Tándem Mas-Munté

Consciente de que él no es "una figura neutra", y de que finalmente serán las bases a quienes decidan, Mas se ha reiterado en su idea de formar un tándem entre él mismo y Munté a la hora de liderar el nuevo partido. Una presidencia que represente la nueva formación de manera casi simbólica y que, por tanto, se sustente, también, por una dirección ejecutiva potente diferente a los cargos de presidente y vicepresidenta.

Mas, que también ha negado que la portavoz del Govern le haya puesto como condición que Jordi Turull fuera el tercero, ha explicado que lo único que Munté le ha pedido es no tener que dejar el Govern "porque ella es una figura muy importante". Pero, según las incompatibilidades aprobadas por el nuevo partido, podría compaginar la vicepresidencia del partido con el cargo de consellera de Presidencia.

Ella, de su lado, se ha mostrado dispuesta a "poder aportar alguna cosa" porque, además, "creo que con Mas me puedo entender", aunque no ha cerrado ninguna puerta porque "puede haber una alternativa" y, ahora mismo, "se están dando por hechas muchas cosas".

Sin tener nada seguro, el candidato a la presidencia de PDC ha asegurado que "si soy el presidente, trabajaré en la dirección que salga" porque "sé perfectamente que no soy la renovación, pero sí tengo espíritu renovador. Toco de pies en el suelo ".