La alcaldesa de Santa Coloma de Gramenet, Núria Parlon, ha asegurado que su intención al frente del PSC será "sacudir" el partido y pilotar un "giro a la izquierda" para "liderar" este espacio político, aunque sin plantearlo como una "competición" con el futuro partido que impulsa Ada Colau.
En declaraciones en Efe, la viceprimera secretaria del PSC y aspirante a las primarias ha defendido que los socialistas catalanes tienen que hacer "un esfuerzo de clarificación del mensaje" y confiar en que su propuesta política es "sólida, solvente y avalada".
"Quiero dar el paso de abanderar esta alternativa que tiene que ser de suma, pero que nos tiene que permitir sacudir la estructura del partido. Eso quiere decir hacer cambios internos que son importantes, pero también en estructuras, dinámicas, maneras de proyectar nuestro mensaje y de hacerlo más creíble y dar un giro a la izquierda", ha afirmado a la alcaldesa de Santa Coloma de Gramenet.
Consciente de que el PSC ha perdido parte "importante" de la militancia y de sus votantes, que los resultados son "estables, pero no son buenos", o de la "elevada" media de edad de sus votantes, ha opinado que "alguna cosa hace falta hacer y hay que hacerla entre todos". "Nuestros votantes", ha argumentado, "nos piden que demos un giro a la izquierda y seamos mucho más contundentes al lanzar mensajes en esta dirección. Y tenemos que hacerlo sin lugar a dudas".
¿Tripartito?
Preguntada sobre si estaría dispuesta a que el PSC formara parte de un tripartito de izquierdas al lado de los 'comunes' y ERC, Parlon ha admitido que las posibles "alianzas de izquierda para configurar un gobierno con mayorías alternativas al independentismo" es "una posibilidad que hay que explorar". Pero siempre que fuera, ha matizado, en una "posición de fuerza" por parte de su partido. "Me gustaría que el PSC liderara esta alianza y no hiciera de muleta de la misma", ha insistido.
Parlon, que ha ironizado con los muchos "perfiles" que se le adjudican, como "podemita, catalanista, independentista o susanista", ha recordado que esta prioridad de viraje a la izquierda también tiene que ir acompañada de una recuperación de los "vínculos" con el socialismo más catalanista, que "tiene que poder volver" al partido.
"El PSC no cuestiona que Catalunya sea una nación"
"El PSC es catalanista, pero no es rupturista. No tiene que renunciar a su catalanidad, pero al mismo tiempo tiene que plantear una solución, que pasa para votar un acuerdo de que nos interpele a todos y con garantías democráticas: la reforma federal", ha esgrimido.
Un "catalanismo constructivo" que "cree en la plurinacionalidad del Estado y que no cuestiona que Catalunya sea una nación, pero eso no quiere decir que no podemos convivir en un marco federal cuando nuestros elementos de singularidad identitaria estén reconocidos y que podemos mejorar nuestra financiación".
Por eso, ha censurado el camino de "unilateralidad" que supondría un referéndum unilateral, ya que no cree que este sea el instrumento que quiera plantear al presidente catalán, Carles Puigdemont, en el cual ve con "voluntad de acordar una consulta".
Y ha rechazado unas posibles elecciones constituyentes: "Si vamos a estas elecciones, nos volveremos a encontrar igual que a las elecciones (plebiscitarias) del 27S. ¿Constituyentes para declarar unilateralmente la independencia? Aquí no hay camino posible".