El independentismo lo ha vuelto a hacer. En una nueva jornada histórica, la ciudadanía ha vuelto a salir a las calles de Barcelona en la manifestación de la Diada 2022. Y lo ha hecho venciendo la amenaza de la desmovilización propiciada por el contexto político actual, definido por el estancamiento del procés, así como la decisión del presidente de la Generalitat y la plana mayor de Esquerra Republicana de vetar la manifestación unitaria organizada por la Assemblea Nacional Catalana. A pesar de todo, se ha conseguido superar la cifra de asistencia registrada el año pasado, que según la organización se situó en 400.000 personas. El resultado en este nuevo Once de Septiembre todavía ha estado más contundente: 700.000 personas, según los cálculos de la ANC, y 150.000 en cifras de la Guardia Urbana.

Manifestación del 11 de septiembre 2022 en Barcelona, DIRECTO

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Sea cual sea la cifra oficial, lo cierto es que en las calles se ha observado, sin ningún tipo de duda, una inmensa oleada de gente que ha llenado el centro de Barcelona. A partir de las cuatro de la tarde, ya se ha ido llenando la avenida Paral·lel, que se había dividido en diez tramos para reunir todo el independentismo. A las 17.14 horas, en una hora simbólica, los manifestantes han empezado a caminar por la línea litoral de la capital, avanzando por el paseo de Colón y de Isabel II, para acabar ante la Estación de Francia y a las puertas del parque de la Ciutadella, donde está el Parlament. Es aquí donde, a partir de las 18.30, se ha dado paso a las intervenciones.

"Independencia o elecciones"

La presidenta de la ANC, Dolors Feliu, ha compartido un discurso que, como se podía imaginar, ha tenido los partidos y las instituciones en su ojo de mira. Así, a pesar de no incluir ninguna referencia directa al conflicto abierto con Esquerra Republicana y Pere Aragonès por su ausencia de la manifestación, sí que ha querido lanzar varios reproches en la línea del mensaje que la organización había anunciado que tendría la movilización. En una advertencia directa en el Gobierno, Feliu ha recordado el 52% de votos independentistas a las últimas elecciones, por lo cual ha insistido en culminar el mandato del 1 de octubre. En caso de que no lo haga, ha recordado que la ANC tiene previsto presentar una lista cívica a los próximos comicios y que no estará "siempre" quejándose. "O hacéis la independencia o convocáis elecciones", ha desafiado acompañada de fuertes aplausos por parte del público, que también han exigido "dimisiones".

Por su parte, el presidente de Òmnium Cultural, Xavier Antich, ha mantenido la misma línea del discurso que ha compartido este mediodía al acto político de la organización cultural, celebrando la gran asistencia. Mucha gente trabajaba para que no llenáramos las calles, para que esto acabara en una bronca. Pero aquí estamos. ¿Quién decía que nos quedaríamos en casa?", ha lanzado. También ha reivindicado la experiencia del 1 de octubre, avisando de que en aquella ocasión se consiguió llegar tan lejos "porque sabíamos dónde íbamos e íbamos juntos". En esta línea, ha apostado por rehacer las complicidades entre los partidos independentistas y empezar un nuevo ciclo para culminar la independencia. "Que crezcan las batallas y confundirnos de enemigo no es ninguna opción. No va de buscar culpables, va de buscar cómplices. Todos queremos la independencia y necesitamos a todo el mundo", ha defendido.

 

"Botiflers y traidores"

La ausencia de Esquerra Republicana y del presidente de la Generalitat no ha evitado que los reproches de los manifestantes se hayan dirigido principalmente hacia los partidos. La importante delegación de Junts no ha recibido críticas, pero sí que se han visto y sentido una multitud de pancartas y clamores con advertencias directas. Así, una pancarta leía 'ERC, Junts y CUP. No os volveremos a votar, traidores', mientras que otra similarmente advertía que 'Los partidos nos han traicionado'. De hecho, al final del acto político, un grupo de personas ha subido al escenario mostrando una pancarta con un lema contundente: 'Botiflers, la historia os juzgará'.