La presidenta de la ANC, Elisenda Paluzie, ha enviado un mensaje claro y contundente a los partidos independentistas ante de centenares de miles de personas que protestaban por la sentencia del 1-O. Les ha reclamado que en caso de que el Estado no atienda sus reclamaciones, actúen: "Desde ya, preparaos para poder en el momento que sea preciso defender y sostener una declaración de independencia".

"La gente estaremos para defenderla desde la lucha no violenta, como estuvimos el 1-O", ha asegurado desde el escenario donde se ha celebrado el acto político de la manifestación de protesta contra las sentencias, ante 525.000 personas, según la Guàrdia Urbana. La presidenta de la ANC ha utilizado el ejemplo de las Marxes per la Llibertat, en las que cuando alguien no podía seguir era relevado, para avisar que la clase política se aplique la misma receta: "quién esté cansado que pare, otro tomará el relevo, pero colectivamente no nos podemos parar".

En un discurso con ecos similares al que protagonizó Carme Forcadell pidiendo a Artur Mas las urnas del 9-N, Paluzie ha advertido a los partidos que la ciudadanía "ha reanudado el camino" y ahora toca a los políticos hacer lo mismo.

Maniobra de distracción

En una intervención encendida, Paluzie se ha mostrado escéptica sobre la voluntad real de aplicar la resolución sobre amnistía y autodeterminación aprobada en el Parlament y ha mostrado el temor que no sea más que "una maniobra de distracción para seguir administrando las migajas".

"Estamos preparados, pedimos a nuestros partidos que lo prioricen", ha advertido.

Previamente, la presidenta de la Assemblea había pedido unidad a los partidos por el proyecto colectivo y, mientras la gente coreaba el clamor de unidad, desde el escenario,ha advertido: "Nos importa muy poco cuántos diputados tiene cada uno".

Acto seguido ha sido el vicepresidente de Òmnium, Marcel Mauri, quien se ha encargado de leer una carta de Jordi Cuixart desde Lledoners para asegurar que "la amenaza de prisión o represión nunca más será un tope a las aspiraciones democráticas de la sociedad catalana".

"El derecho a la huelga se gana haciendo huelga, el derecho a la protesta se gana protestando y el derecho de voto se gana votando", ha apuntado el responsable de Òmnium.

Cuando acababa el acto ha llegado el vicepresidente, Pere Aragonès, y la consellera de Justícia, Ester Capella.