Junts ha abandonado el Govern después de que así lo decidiera su militancia en plena elaboración de los presupuestos, confeccionados por Jaume Giró como conseller de Economia. Giró era de los partidarios de no salir del Govern y durante la crisis entre los socios siguió trabajando por las cuentas, e incluso ya había enviado a cada departamento su asignación presupuestaria. Ahora, la nueva consellera, Natàlia Mas, tendrá que negociar ante esta nueva etapa en solitario de ERC en el Govern los apoyos del resto de partidos para que estos se puedan aprobar en tiempo y forma, como ya sucedió el año pasado gracias al  de los comuns. En este sentido, Oriol Junqueras, presidente del partido, espera que sus exsocios y con quien ha reiterado que siguen coincidiendo en muchas cosas, voten a favor de las cuentas, según ha expresado en una entrevista a TV3.

"Si hasta ahora los de Junts consideraban que los presupuestos eran buenos porque los había hecho su conseller, no entendería que horas más tarde votaran en contra. Sería extraño que alguien hiciera los presupuestos, pero después no los aprobara. Hacemos un llamamiento a la responsabilidad de Junts", ha resumido Junqueras, aunque no ha aclarado si los presupuestos definitivos finalmente serán los que había diseñado Jaume Giró al frente de Economia, o se modificarán. En este sentido, sólo ha asegurado que están dispuestos a hablar de los presupuestos "con todo el mundo", excluyendo al PSC, ya que considera que el partido no forma parte del gran consenso para acabar con la represión del Estado sobre Catalunya y el independentismo.

Prorrogar los presupuestos, una opción

Junqueras ha reiterado que aunque un 55% de la militancia de Junts quiso salir del gobierno, también había centenares de afiliados que posicionaban a favor de quedarse y han salido del Govern de mala gana, "conscientes de que hemos hecho cosas extraordinarias juntos". Por eso, ha pedido que puedan seguir construyendo codo con codo, aunque con Junts desde fuera ahora ya del Govern. Por eso, Junqueras también ha admitido que la prórroga de los presupuestos es una opción y que se ha utilizado muchas veces, pero cree que es más posible que Junts los acabe aprobando.

Con todo, el exvicepresident del Govern ha asegurado que no solo espera contar con Junts para aprobar los presupuestos, sino para aquellas políticas que siguen compartiendo, igual que con la CUP o los comuns, sea desde el Govern o desde la oposición: "Defendemos la vía amplia hacia la amnistía y ojalá no se descuelgue nadie y se incorporen muchas otras voces. Creemos que compadecen con nosotros estos objetivos y que no dejarán de defenderlos porque ya no están en el Govern".

Un nuevo gobierno con mucha experiencia

El presidente de ERC también se ha referido a las nuevas caras del Govern, asegurando que la decisión corresponde al president Aragonès y su partido le ha apoyado. Para Junqueras, ahora ERC "asume el reto de servir lo mejor posible al pueblo de Catalunya", y lo hace con nuevos consellers a quienes ha definido como "personas extraordinarias, con mucha capacidad más que demostrada". Entre los escogidos hay personas que provienen de otros partidos como el PSC, Podemos o CDC, pero para Junqueras eso no representa ningún problema, ya que tienen "mucha experiencia y conocen bien el país", aparte de defender que el futuro político de Catalunya se tiene que resolver con un referéndum.

Como ya ha hecho en otras ocasiones, Junqueras ha aprovechado para recordar que ERC sí que ha cumplido con los pactos de investidura. "En Madrid estamos muy coordinados, solo nos diferencia un 10% de las votaciones, en las que Junts ha preferido estar al lado de Vox. Si en el Senado tienen un grupo propio, es porque ERC se lo facilitó, creo que ha habido una gran generosidad por nuestra parte y está bien recordarlo", ha empezado, para después hablar de la dirección estratégica del independentismo, que él identifica en el Govern y el president Aragonès. Al mismo tiempo, también ha defendido que en la mesa de diálogo solo hubiera miembros del Govern y no del partido, para darle más legitimidad.