Como es Oriol Junqueras, no acaba de llamar a las cosas por su nombre pero se le entiende todo. Al día siguiente de la ruptura del Govern de la Generalitat, con la salida de Junts per Catalunya, Esquerra Republicana todavía calibra qué apoyos puede tener o no. Y el presidente de ERC ha sido claro: la legislatura tiene que poder seguir adelante con "el apoyo del país", de todos aquellos que comparten objetivos. Ha usado un ejemplo: "Si aquellos que han elaborado los presupuestos están dispuestos a votarlos, habrá presupuestos. Y si no los quieren votar, habrá una prórroga". En cambio, ha alejado el escenario de pactos con el PSC, que "no está comprometido con el fin de la represión", pese a la mano tendida de Salvador Illa.

 

Ha sido la única línea roja que establecen desde Calàbria, y ha costado más de una pregunta establecerla. "La línea roja es muy clara, es el compromiso con el bienestar de la gente, con la dignidad individual y colectiva, con el fin de la represión, con la democracia, con la idea de que la ciudadanía tiene que decidir su futuro en un referéndum de autodeterminación", ha respondido en primer lugar Oriol Junqueras. A la tercera cuestión sobre el tema ha aclarado que "es evidente que el PSC no está comprometido con el fin de la represión, al menos en la medida en que sigue avalando buena parte de la represión" y "aplaudieron nuestro encarcelamiento". Mientras esto siga siendo así, un escenario de pactos con los socialistas catalanes queda lejos.

Las posibles alianzas del nuevo Govern de Aragonès en solitario han sobrevolado la rueda de prensa posterior a la ejecutiva extraordinaria de ERC, justamente porque sólo tienen 33 escaños en el Parlament. Pero el líder republicano se ha mostrado convencido de que podrán mantener los apoyos que contaban hasta ahora, incluidos los de Junts per Catalunya y los comunes, sin citarlos por su nombre. Junqueras ha expresado la "voluntad de entenderse con todo el mundo" y ha señalado que les siguen uniendo "grandes objetivos y principios", como la defensa del referéndum o la lucha contra la represión. "Confiamos en que todos aquellos que lo han defendido sigan trabajando en esta dirección", ha asegurado. Y ha remachado: "Si el país nos ayuda, seremos capaces de hacer cosas extraordinarias".

El presidente de Esquerra Republicana ha salido acompañado de parte de la ejecutiva, que lo han acompañado en una imagen de unidad, desde la secretaria general adjunta Marta Vilalta, hasta el portavoz en el Congreso de los Diputados y flamante alcaldable en Santa Coloma de Gramenet, Gabriel Rufián.

Mano tendida de Illa

"Construir una alternativa no es decir no en todo". Este ha sido el planteamiento del primer secretario del PSC, Salvador Illa, delante del nuevo escenario político provocado por la decisión de la militancia de Junts de abandonar el Govern. En este sentido, desde Bagà (Berguedà), Illa ha afirmado que mantiene la mano tendida al Govern del president Pere Aragonès para hablar sobre la aprobación de los presupuestos del 2023. "Lo más importante que tenemos ahora en frente son los presupuestos. Haremos lo que ya hemos dicho que haríamos. Mantengo la mano tendida para que Catalunya tenga unos presupuestos de país", ha afirmado.

Rufián en Santa Coloma

Más allá de la crisis de gobierno, la ejecutiva de ERC ha coincidido con la proclamación de Gabriel Rufián como candidato a las municipales de Santa Coloma de Gramenet. Oriol Junqueras ha defendido el salto a la política local: "No sé qué funciones tendrá en Santa Coloma, pero estoy seguir que es de por vida este compromiso". Y también que lo compagine con el cargo de portavoz en Madrid: "Queremos poner a los mejores en todas partes. Y Gabriel Rufián es el mejor que tenemos en las listas del Congreso. Tiene toda mi confianza personal, estima y consideración".