La vicepresidenta del Govern valenciano, Mònica Oltra, ha asegurado hoy que, seguramente, si la líder de Ciudadanos en Catalunya, Inés Arrimadas, "fuera un hombre, ya le estaría disputando el liderazgo" al presidente de su partido, Albert Rivera, "pero es una mujer".

Oltra (Compromís) ha hecho estas afirmaciones durante una conferencia en el Foro Europa Tribuna Mediterrània, donde ha admitido que esta reflexión "seguro que es polémica", pero ha añadido que le da "igual", porque es lo que piensa. La vicepresidenta ha asegurado que "el estirón" que en estos momentos tiene Ciudadanos en España viene provocada por el liderazgo que Inés Arrimadas está teniendo en Catalunya.

Preguntada sobre si se pueden trasladar en el ámbito del País Valencià las encuestas sobre Ciudadanos, Oltra ha contestado que los sondeos están muy ligados "al liderazgo político y a los mensajes en esta campaña que ha dado Arrimadas", por lo que no cree que haya una "translación automática" de eso.

Catalunya, en un callejón sin salida

Con respecto a qué pasará a Catalunya, ha afirmado con ironía que si lo supiera "sería la directora de la NASA", y ha considerado que Catalunya está "en un callejón sin salida" y lo que necesita es "una acción política de madurez que ni un lado ni el otro han tenido".

La vicepresidenta ha insistido en que Mariano Rajoy y el Gobierno de España tienen un problema territorial que no sólo es Catalunya, como se ha visto en la protesta de Extremadura por el tren, el del País Valencià por la financiación autonómica o a Murcia por el muro del AVE.

"Y Rajoy sigue fumándose cigarros y sin reaccionar", ha lamentado Oltra, para quién este proceso ha demostrado que el Gobierno español es "un problema para España y un fracaso", y además "gobierna Catalunya con cuatro diputados, lo cual es una anomalía democrática" en la cual hay que poner un plazo.

Ha insistido que en Catalunya hace falta "diálogo, sentarse y tener luces largas", cosa que parece que no tienen en el Gobierno de España, con lo cual el problema "seguirá enquistado" y por lo tanto "pueden pasar muchas cosas".

Según su opinión, la situación está "bastante paralizada" y "muy encarnizada" si no se hace lo que se tendría que haber hecho hace un año, o dos o tres, que es sentarse a dialogar, y si hace diez años no se hubiera recurrido el Estatuto tampoco estaría en la situación actual.