Los rectores de 8 universidades públicas catalanas han firmado un manifiesto donde se oponen a la sentencia que impone el 25% de castellano en la enseñanza y salen en defensa de la inmersión lingüística. Los rectores piden también que cualquier debate sobre las bases lingüísticas de Catalunya se realice más allá de los partidos, y que también participen en él las organizaciones y entidades sociales. El texto ha sido suscrito por los rectores de la Universitat de Barcelona, Universitat Autònoma de Barcelona, Universitat Politècnica de Catalunya, Universitat Pompeu Fabra, Universitat de Girona, Universitat de Lleida, Universitat Rovira i Virgili y Universitat Oberta de Catalunya.

Según los rectores, el modelo pedagógico de la escuela catalana "ha sido y es un modelo de éxito que garantiza las competencias lingüísticas de su alumnado". "Los resultados de la inmersión lingüística han evidenciado su beneficio, tanto para el alumnado como para el seno de la sociedad, contribuyendo así a la cohesión social, a la igualdad de oportunidades y a la normalización del uso de la lengua catalana. Por lo tanto, pedimos que la política lingüística en la escuela no se base en porcentajes arbitrarios desconectados de la realidad territorial y se deje de instrumentalizar políticamente algo tan importante como es la enseñanza", han añadido.

"Los profesionales del mundo educativo, atendiendo el contexto social, tienen que ser las personas que determinen qué modelo lingüístico es el más adecuado para garantizar la competencia lingüística del alumnado. Hace falta que se garantice un modelo lingüístico de escuela catalana estable que favorezca la inclusión, la cohesión y la progresión social del país. Finalmente, los rectores y la rectora de las universidades públicas catalanas, tal como recoge la propuesta de Pacte Nacional per a la Llengua, piden un debate constructivo para que las bases lingüísticas del futuro de Catalunya y de toda la comunidad lingüística sean compartidas tan ampliamente como sea posible con la participación y el compromiso de las fuerzas políticas, pero también de las organizaciones, de las entidades y de toda la población", apunta.

 

Los rectores se han pronunciado después de que la permanent de Junts ha acordado hoy por unanimidad no participar en la reforma de la ley del catalán pactada a finales de marzo con PSC, ERC y comunes. La formación de Carles Puigdemont ha argumentado dos motivos para descabalgarse definitivamente de aquella propuesta: "Porque no hay consenso con el sector educativo y las entidades en defensa de la lengua, y porque no frena un fallo judicial que impone 25% en las aulas". Junts ha trasladado ya su decisión a ERC y al president de la Generalitat, Pere Aragonès, y ha anunciado que planteará una propuesta concreta para responder a la ofensiva judicial contra la lengua. Los comunes han propuesto por su parte aprobar la reforma de la ley de política lingüística incorporando al castellano también como lengua vehicular, con el PSC y ERC, y sin Junts.