El obispo de Córdoba, Demetrio Fernández, ha dicho alegrarse del "vuelco electoral en Andalucía producido el pasado 2 de diciembre en las elecciones autonómicas", que "ha sido espectacular", y que ha achacado, entre otras cuestiones, a las "promesas incumplidas", sin nombrarlo, del Gobierno socialista y también a los ataques a "la libertad religiosa", reclamando "la propiedad pública de la Mezquita-Catedral" con "argucias".

En su carta semanal, Fernández ha opinado que el citado vuelco electoral "ha superado con creces las expectativas y los temores de unos y de otros", y se debe al hecho de que "el cristiano no es ajeno a lo que sucede en este mundo; por el contrario, intenta con los medios a su alcance transformar la sociedad para hacer un mundo nuevo, más justo, más humano, más fraterno, más con Dios y más para el hombre".

"El cristiano ―ha proseguido― recurre sobre todo a los medios sobrenaturales de la oración, de la confianza en Dios, del amor fraterno que Jesús nos ha enseñado y, al mismo tiempo, trabaja y se compromete en la transformación de este mundo, mediante el compromiso político concreto que cada uno estima en conciencia".