Cuando la pandemia de la Covid tiende a la baja, y está pendiente de llegar el dinero de la UE para la reactivación económica, el gobierno del PSOE y Podemos ha anunciado hoy una nueva lluvia de millones en el AVE, el ferrocarril de alta velocidad español. El ministro de Transportes, José Luis Ábalos, ha anunciado que el AVE llegará a Burgos una vez "vencido el primer trimestre del 2022".

Adif publicó el 2 de abril en el diario oficial de la UE, un anuncio sobre la línea Burgos-Vitoria que prevé que antes de finales de año se liciten 15 proyectos que servirán para construir 91 kilómetros de línea, con un presupuesto de 20 millones de euros más IVA.

Después de reunirse hoy, acompañado por el delegado de gobierno a Castilla y León, Javier Izquierdo, con el alcalde de Burgos, Daniel de la Rosa (PSOE), el ministro ha asegurado que ya han finalizado las pruebas de seguridad del tramo Venta de Baños (Palencia)-Burgos, y que se están realizando los últimos trámites, en paralelo a la formación de maquinistas y la revisión de las vías.

Según Ábalos, el Gobierno ya está preparando el siguiente tramo, que será el de Burgos a Vitoria, para el que la declaración del estudio de impacto ambiental es "inminente". El estudio quedó paralizado durante la fase más aguda de la pandemia para evitar que se tuviera que suspender totalmente. El ministro ha anunciado que la redacción del proyecto podría salir a concurso próximamente.

Corredor central

El ministro también ha confirmado la intención de sacar adelante el denominado corredor central de mercancías, que va de Algeciras a la frontera de Irún. Y ha señalado que una vez se conozca el proyecto que elaborarán ayuntamientos, cámaras de comercio y los puertos afectados lo estudiará y procurará que salga adelante, incluida la reapertura del tramo entre Aranda de Duero y Burgos que acortaría la distancia con Madrid para el transporte de mercancías.

El Gobierno también dice, al menos formalmente, que quiere sacar adelante el corredor mediterráneo, un proyecto largamente reivindicado por el Govern y los sectores económicos de Catalunya y el País Valencià. Pero que se concreta con mucha parsimonia.