El expresidente de Catalunya Caja Narciso Sierra se ha sentado hoy por primera vez en el banquillo de los acusados. Durante dos meses lo juzgarán por los sobresueldos que pagó a la antigua cúpula de la entidad financiera. En la entrada esta mañana en la Audiencia de Barcelona ha dicho que no se arrepiente de su gestión.

Las defensas han pedido la nulidad del juicio de Catalunya Caja, pero no lo han conseguido. Como era de prever. Tampoco se marchará de la Audiencia Nacional donde se juzgan los casos con más de 10 años de penas de prisión aunque el máximo que se pide para los acusados es de 4 años. Y es que la desaparición y retirada del caso de la CIC, la Conferedación Intersindical de Cajas, que acusaba y pedía justamente penas de 10 años, ha dejado en falso las acusaciones. Con todo, ni nadie ha pedido trasladar del caso a un juzgado de lo penal ni el juez lo ha considerado.

Por lo tanto, el jueves que viene, empiezan las declaraciones de los acusados. Hoy se han hecho las cuestiones previas. Han durado menos del previsto. Se'habían agendado dos días para hacerlas, pero con 2 horas de la vista de hoy ya habido lo bastante.

Sierra, Tranquilo y preocupado

Sólo han hablado los abogados, el Fiscal Fernando Maldonado y el magistrado. Y Narciso Sierra, que ha hecho declaraciones en la entrada y la salida. Si entrante ha dicho: "No me arrepiento. Lo que hice fue lo que tenía" que "hacer". En la salida ha querido dejar claro que "estos sueldos escandalosos no existen. El Fiscal sólo acusa por el sueldo del director".

Narcís Serra ha explicado que está "tranquilo" y al mismo tiempo "preocupado": Estoy con mucha tranquilidad. Estoy seguro que no aclararemos todo. Y no niego que estoy preocupado. Sería insólito que una persona que estuviera bajo juicio no estuviera preocupada. Estoy tranquilo y preocupado".

También ha querido defender su inocencia: Hicimos lo que correspondía. Muchas cosas las vimos antes que otras autoridades. No hay más que decisiones legales y legítimas y estos sueldos escandalosos no existen".

La fiscalía pide cuatro años de prisión para Serra y Todó. En total, la sección octava de la Audiencia juzga un total de 41 miembros del consejo de administración por haber autorizado sueldos "desproporcionados" en la cúpula de la antigua caja de ahorros a pesar de la crítica situación que atravesaba la entidad, que tuvo que ser recapitalizada con una inversión de dinero público de más de 12.000 millones de euros.

Cuestiones previas

La primera sesión del juicio dedicado a la cuestiones previas ha servido para descartar a David Fernández como testigo de la CUP, que es una de las acusaciones particulares.

Pau Molins, abogado de Narcís Serra ha cuestionado que la CUP esté legitimada para ejercer la acción civil y a pedir una fianza de 10 millones de euros. Por eso ha pedido la nulidad de esta parte del sumario. Pero el presidente del Tribunal se ha negado. El juez de instrucción, de hecho, ya había avalado esta demanda de la CUP y su personación como acusación.

El juez también ha decidido que una vez declaren todos los acusados, se podrán marchar a casa y no están obligados a estar presentes en todas las sesiones del juicio.