La consellera de Presidència, Neus Munté, ha asegurado que la cuestión de confianza a la que se someterá el 28 de septiembre el president de la Generalitat, Carles Puigdemont, "sería el momento" para anunciar posibles cambios en la hoja de ruta independentista.

En una entrevista de Europa Press, la también vicepresidenta del PDC ha destacado que todavía es pronto para hablar del contenido exacto de la comparecencia de Puigdemont pero considera que será una buena ocasión para "analizar si se pueden introducir elementos de mejora" del plan soberanista.

El nuevo secretariado de la CUP exige que se modifique la hoja de ruta para incluir, entre otras medidas, un referéndum unilateral de independencia (RUI), un paso que para los anticapitalistas es imprescindible antes de empezar a negociar los Presupuestos del 2017.

En cambio, el Govern vincula ambas negociaciones porque, según Munté, Puigdemont necesita unos nuevos presupuestos para poder desplegar sus compromisos soberanistas y sociales: "No es lo mismo disponer de recursos para avanzar en las estructuras de Estado que no tenerlos".

Reflexión sobre los presupuestos

Tras el 'no' de la CUP a las cuentas de 2016, los ciudadanos, las empresas y las entidades sociales han podido comprobar "que no es lo mismo tener o no tener Presupuestos y que es muy importante aprobar unos nuevos", ha asegurado.

Munté espera que la CUP se dé cuenta de esto y "reflexione para entender la vinculación necesaria entre la cuestión de confianza y los presupuestos", aunque recuerda que serán dos tramitaciones diferenciadas en el Parlament.

Además, detalla que los anticapitalistas se comprometieron a facilitar la tarea del Govern y favorecer el despliegue de la ruta independentista: "No son las dudas de la hoja de ruta lo que nos ha llevado hasta aquí, sino las dudas de si la CUP respeta los acuerdos firmados".

Munté confía en que Puigdemont supere la cuestión de confianza y la ve como una oportunidad para "coger empuje" y culminar el despliegue de la hoja de ruta independentista.

Buscar otros pactos

En caso de que no haya un acuerdo, Munté no cree que se deban convocar elecciones, sino que habrá que buscar el apoyo de otros partidos del arco parlamentario: "Hay otros que, sin compartir el objetivo del Estado propio, pueden tener un interés con la aprobación de unas cuentas que estén dando respuesta a necesidades sociales de la ciudadanía".

Ha asegurado que el Ejecutivo ya trabaja en las nuevas cuentas para poder llevarlas al Parlament en octubre y que volverán a ser "las más sociales de la historia", algo que puede seducir a la CUP.

Ha defendido que el proyecto de cuentas del 2016 ya incorporaba las partidas sociales más elevadas de la historia, y, preguntada sobre por qué cree que la CUP las aceptaría ahora si entonces las rechazó, ha respondido que "nadie quiere una situación de bloqueo como la del Estado".

"Todos hemos sacado conclusiones y reflexiones de aquello y me consta que también la CUP, donde ha habido cambios en la dirección que quizás tienen incidencia a la hora de negociar", aunque el asunto no se abordará hasta la última semana de agosto.