El escritor, abogado y director escénico Josep Maria Loperena ha muerto este viernes en la madrugada a los 82 años. Durante los años sesenta y setenta fue director escénico y, más adelante, un reconocido abogado de activistas independentistas represaliados en procesos en la Audiencia Nacional española, y de colectivos del sector cultural. Fue abogado también de los Comités de Solidaridad con los Patriotas Catalanes y de grupos como el Movimiento de Defensa de la Tierra o Tierra Libre.

Nacido en Alguaire (Segrià) en 1938, estudió Filosofía y Letras y Derecho a la Universidad de Barcelona y fue director de teatro. A finales de los 70 dejó la dirección teatral y se dedicó plenamente a la abogacía. Colaboró en varios medios de comunicación y publicó libros de derecho y ensayos sobre teatro

Como abogado, Loperena también fue presidente del Comitè de Dret Humans de l'I·lustre Colegio de Abogados de Barcelona y fue protagonista de procesos chalados durante la Transición, como los relativos al asalto al cuartel de Berga, el atentado de la Scala o la obra La vuelve de Els Joglars.

Además, interpuso una demanda contra José María Aznar delante de la Corte Penal Internacional. Fue el año 2004, en nombre de 14.500 actores, y se encargó de esta querella contra el entonces presidente del Gobierno, por la colaboración de su gobierno en la invasión del Iraq. También había representado a Lluís Llach en su causa contra Felipe González por incumplimiento de la promesa que España no entraría en la OTAN, y, entre más, intervino en el juicio por el montaje del incendio en el restaurante Scala de Barcelona orquestado por el estado español.